Ciudad de México.- La mayoría de los alimentos tienen microorganismos que se pueden eliminar una vez que se lavan antes de consumirse, sin embargo, durante la época de calor estos pueden llegar a multiplicarse mucho más rápido y afectar su composición.
Un alimento que se deja expuesto al calor puede llegar presentar hongos y bacterias que en muchas ocasiones pueden ser identificados a plena vista, pero en otras son indistinguibles por lo que provocan intoxicaciones o problemas digestivos graves.
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Tanto en frutas, verduras y alimentos preparados el tiempo para que su consumo deje de ser seguro es de tan solo dos o cuatro horas con una exposición constante a temperaturas elevadas.
Afortunadamente existen algunas formas de evitar que un ingrediente se descomponga gracias al calor.
- Guarda los alimentos de acuerdo a sus características, en el refrigerador, en la sombra o incluso congélalas.
- Cuida la temperatura de tu refrigerador, debe de estar en los cuatro y cinco grados centígrados.
- No cocines grandes cantidades de comida, prepara lo justo, de esta forma solo harás lo que realmente comerás.
- Consume lo que preparaste lo antes posible.
- En dado caso de que no comas toda la comida, guardarlos en un recipiente con tapa dentro del refrigerador.
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Si por error dejaste algún ingrediente al sol, verifica su olor, aspecto, color y textura, además considera el tiempo de exposición, si son más de cuatro horas, mejor deséchalo.
Fuente: Gastrolab