Kuala Lumpur, Malasia.- Durante el año 2018 se detectó la presencia del octavo coronavirus que podía saltar de animales a seres humanos, este patógeno nació de los perros, pero también podía afectar a los dueños de las mascotas.
Recientemente este virus llevó al hospital a ocho personas en Malasia, siete de ellos eran niños, el más pequeño apenas tenía cinco meses y medio, por el momento la comunidad científica afirma que no existen pruebas tangibles de que esta nueva enfermedad se convierta en una pandemia como el Covid-19.
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Uno de los pacientes desarrolló neumonía, pero ninguno de ellos murió, de hecho todos fueron dados de alta después de pasar cuatro días en el hospital, tan solo requirieron una terapia de oxígeno y estuvieron listos para regresar a sus hogares.
Los expertos afirman que la aparición de nuevos coronavirus en el entorno humano es algo que podría ser común con el pasar del tiempo, ya que las personas han comenzado a invadir la vida silvestre y la convivencia con animales puede generar más enfermedades. La Universidad de Duke y la Estatal de Ohio bautizaron a esta nueva cepa como CCoV-HuPn-2018.
Fuentes: Daily Mail, Twitter