Ciudad de México.- Escribir sana. Y no, no es una frase poética; es una realidad. Cuando una persona inicia un proceso de sanación, ya sea con un psicólogo u otro profesional de la salud mental, uno de los mayores retos con los que se puede encontrar es con reconocer y expresar sus pensamientos y emociones. Es aquí donde la escritura puede transformarse en una herramienta con una función terapéutica. Conoce aquí qué es la escritura terapéutica y sus principales beneficios para ti.

¿Qué es la escritura terapéutica?

Cuando se habla de escritura terapéutica se hace referencia a un conjunto de ejercicios de escritura con fines terapéuticos que se realizan, generalmente, con una pluma o lápiz y una libreta (aunque también puede hacerse en una computadora o celular). Su principal fin es que la persona que va a dedicar tiempo a la narración logre plasmar e identificar los pensamientos o sentimientos que no puede o le cuestan trabajo verbalizar. Aunque parece una actividad sencilla, es bastante compleja; no obstante, cuenta con múltiples beneficios para el paciente que la realiza.

Este tipo de terapia puede ser auxiliar en cualquier proceso de sanación, y es muy recomendada para personas que están pasado por alguna situación de estrés o que padecen de trastornos de ansiedad; problemas de autoestima o depresión, entre otros.

Los principales beneficios de la escritura terapéutica son:

• Ayuda a darle un nombre a las emociones, incluso si son negativas.
• Es un auxiliar para gestionar los sentimientos y los pensamientos.
• Es una excelente herramienta para conocerse a uno mismo.
• Hace más claras las metas y deseos de quién escribe.

Para poder atender y regular una situación incómoda, es indispensable nombrarla; la escritura terapéutica es una excelente herramienta para hablar de todo eso que duele o causa vergüenza y no es fácil de reconocer. Una vez que se les dé su espacio a los sentimientos no gratos, será más fácil gestionarlos y soltarlos.

¿Cómo puedo empezar a realizar escritura terapéutica?

Como ya mencionó, la escritura puede ser un auxiliar en un proceso terapéutico, no obstante, si no cuentas con los recursos para ir con un psicólogo o profesional de la salud mental, la narración te puede ayudar a ir trabajando lo que incomoda. Lo único que necesitas es un lápiz, una libreta y establecer un momento de tu día para escribir.

Aquí unas cosas de debes tomar en cuenta al momento de empezar con la escritura terapéutica:

• No le temas a la 'hoja en blanco'. Escribir te ayudará a desbloquear cosas que quizá no habías pensado de forma consciente, pero que forman parte de tu vida. Para empezar a narrar en tu libreta, puedes buscar preguntas en Internet, o simplemente puedes hablar de tu vida.
• Trata de mantenerte concentrado. Procura que el tiempo que dediques a escribir sea especial e íntimo. Puedes poner música o quemar algún incienso, así estarás relajado y podrás desahogarte con mayor comodidad.
• No busques escribir cosas bonitas o buenas. Recuerda que el fin de esta clase de escritura es que transcribas tus inquietudes, pensamientos o sentimientos, aunque sean negativos; trata de hacerlo de forma sincera y sin filtros.
• Desahógate. Finalmente, si en un momento quieres llorar, hazlo. Poco a poco soltarás todo lo que te duele; sin embargo, si lo consideras necesario, puedes buscar a ser querido o un profesional para hablar de las inquietudes que se vayan presentando.

La escritura terapéutica te ayudará a cuidar tu salud mental, lo que se traducirá en una mejor relación contigo mismo, pero también con la gente que te rodea. ¡Aplícala y cuéntanos cómo te sientes!

Fuente: Tribuna