Océano Atlántico.- Si bien, ya pasaron más de 100 años del hundimiento del Titanic, aún a la fecha continúan surgiendo historias interesantes de cada uno de los pasajeros que abordaron la mítica nave. Tal es el caso de Anne Elizabeth Isham, una mujer que abordó el barco con la esperanza de reunirse con su hermano, en Nueva York, sin embargo, jamás llegó a su cita, porque decidió quedarse en el barco a acompañar a su perro.
'Lizzie', tal y como le llamaba su familia, nació el 25 de enero de 1862, Illinois, Estados Unidos. Era la primera hija de Edward Swiff Isham, un prolífico abogado y político de la época, por lo que Elizabeth nunca pasó por carencias. En el año 1903, la mujer, de entonces 41 años, se mudó a Francia para vivir con su hermana; sin embargo, cada verano regresaba al país norteamericano para pasar el tiempo con su hermano, Edward Isham.
El día 10 de abril de 1912, Elizabeth abordó el histórico barco junto a su fiel compañero, un gran danés, que era su adoración. De acuerdo con algunos informes, la mujer, de entonces 50 años, se hospedó en el camarote C-49, al costado del coronel Archibald Gracie, quien por ciento, aseguró que no recordaba haberla visto durante los días que ambos vivieron en el Titanic. Como muchos sabrán, el destino del barco fue trágico, al igual que el de 'Lizzie'.
El día del hundimiento de la nave, Elizabeth, al ser una dama de primera clase, fue una de las primeras en subir a un bote salvavidas; sin embargo, los oficiales le dijeron que no podía llevar consigo a su mascota, por lo que ella decidió ceder su lugar y quedarse con su perro hasta el final. Si bien, este hecho no ha podido ser corroborado por los historiadores, existe el testimonio de una mujer, quien pasó días más tarde por la zona del hundimiento en otro barco.
Según datos de la anónima testigo, cuando ella pasó por la zona pudo ver a varias víctimas del Titanic flotando en el agua, entre ellas resaltaba la de una mujer, de aproximadamente 50 años, quien estaba abrazada a un perro de gran tamaño. Se cree que esta persona habría sido Elizabeth Isham, aunque esto no pudo ser confirmado jamás, porque el cuerpo de 'Lizzie' nunca fue recuperado.
De acuerdo con algunos informes, la familia de Lizzie colocó un memorial a la mujer y a su perro, en la mansión de la familia, por otro lado, Elizabeth pasó a la historia por haber sido una de las personas más demostró su amor a los animales. Cabe señalar que ella, fue una de las cuatro pasajeras de primera clase que perdieron la vida en el naufragio del Titanic, las otras dos fueron Edith Corse Evans, quien cedió su lugar a su amiga, quien estaba casada y tenía hijos, Ida Straus, una mujer de la tercera edad que no se quiso marchar sin su esposo y Bess Allison, quien saltó del bote salvavidas para buscar a su esposo e hijos.
Fuentes: Tribuna