Tennessee, Estados Unidos.- Britney Spears estuvo en el ojo del huracán después de que fue golpeado por un jugador de la NBA a comienzos de este mes. Cuando parecía que las cosas se habían calmado en la vida de la intérprete de Gimme More, el nombre de la estrella pop regresa a los titulares cuando su exesposo, Jason Alexander fue detenido por las autoridades bajo el cargo de acoso, en Estados Unidos.
De acuerdo con información del medio estadounidense, TMZ, los hechos ocurrieron en Tennessee, el pasado miércoles, 2 de agosto, en horas de la mañana. Dado a que el caso no involucra directamente a personas del medio del espectáculo, muchos datos son desconocidos, como por ejemplo, se desconoce quién pudo haber sido la persona que levantó los cargos contra el exesposo de la intérprete de Circus.
Hasta el momento en que se redactó esta nota, tampoco se sabía Jason se vería obligado a pagar una fianza, si será liberado o si comparecerá ante un tribunal. Cabe señalar que esta no es la primera vez que Alexander tiene problemas con las autoridades por cruzar los límites con otras personas, puesto el año pasado fue detenido por las autoridades al burlar la seguridad de la casa de Britney Spears con la finalidad de impedir su boda con Sam Asghari.
Según algunos informes, Jason Alexander fue descubierto porque transmitió un video en vivo a través de Instagram, en donde mostró las decoraciones de la boda de la cantante con el actor de Family Business. El sujeto mencionó que Britney Spears le envió una invitación puesto ella se estaba casando en contra de su propia voluntad, por lo que él había acudido con la firma intención de detener la boda.
"Britney Spears me ha invitado aquí. Es mi esposa, mi única esposa. La casan contra su voluntad y vengo a impedir la boda."
Derivado de estos hechos, Jason Alexander enfrentó a la justicia bajo los cargos de acosó y otros delitos menores como allanamiento de morada, vandalismo y agresión. Luego de esta incómoda situación, un juez emitió una orden de restricción contra el exesposo de la cantante, por lo que a partir de entonces no puede acercarse a la estrella pop a menos de 91 metros de distancia, por los próximos 3 años.
Pero esto no fue todo, ya que, Jason también tuvo que reparar los daños al pagar 100 mil dólares. Aunque uno pensaría que tras esto, Alexander se detendría, la realidad es que no fue así, ya que, según algunos informes, el mencionado individuo fue detenido por un presunto robo de joyas, aunque en esta última situación no estuvo involucrada la cantante de Oops!... I Did It Again, Baby One More Time y Criminal.
Fuentes: Tribuna