Ciudad de México.- Survivor México trajo de regreso algunos exparticipantes, quienes aceptaron el reto de volver a las famosas playas de República Dominicana con la intención de tener su revancha y poder conquistar el título, así como el premio de dos millones de pesos, siendo Gary Centeno uno de ellos, aunque nuevamente se le escapó la oportunidad y resultó eliminado en medio de una gran polémica.
El modelo dijo haber entrado con una estrategia y una actitud completamente diferente a la que tuvo en la segunda edición, pero después de varias semanas de aislamiento y la presión de la competencia sacaron a relucir su carácter, lo cual lo llevó a tener problemas con varios de sus compañeros, protagonizando fuertes discusiones por las que incluso recibió un castigo de parte de la producción, pues estuvo a nada de llegar a los golpes con Aarón Albores.
Firme en que quería llegar a la fusión, Gary decidió traicionar a su tribu y armó toda una estrategia con sus rivales para conseguirlo, así que estuvo dispuesto incluso a robar a su propio capitán, lo que no esperaba es que sería descubierto y al final lo que hurtó no era lo que imaginaba y terminó exhibido a nivel nacional, además de que no pudo evitar que lo lanzaran al ruedo para pelear por su lugar.
El exrepresentante de los Toros no logró vencer a sus compañeros y salió nuevamente furioso del programa e incluso se le plantó de frente a Pablo Martí y nuevamente dio muestra de que no tiene un gran control de sus emociones, así que en redes sociales no le ha dejado de llover hate, tanto por su traición como por la actitud que mostró en variadas ocasiones, por lo que los últimos días no han sido tan buenos para él.
Ahora que Gary Centeno regresó a la Ciudad de México, contó en exclusiva a Carlos 'Chicken' Muñoz para su podcast De lo que uno se entera que es consciente de su fuerte carácter y antes de irse a Survivor México, pidió por medio de redes sociales que no se metieran con su familia, sin importar sus acciones dentro del reality, pues para él es un tema sagrado.
Lo dije en mi último post, no sé si leíste mi último post antes de irme 'Lo único que pido es que no se metan con mi familia', juegue como juegue y ojalá que esto sea consciente, pero más allá de eso, la verdad es eso, que feo que se metan con tu familia".
En medio de todo lo que han dicho de él, Gary reconoce que tiene un problema de ira, el cual trató de controlar en todo momento, pero muchas veces no lo logró: "Son cosas que la gente no es consciente y dice 'No, pobrecita, necesita un psicólogo', claro que necesito un psicólogo. Y no un psicólogo, necesito más, un psiquiatra y necesito terapia, claro que voy a ir", aseguró.
Finalmente, el también actor destacó que ese problema ya lo tenía identificado y por lo mismo creyó que podría controlarlo, pero no fue así, razón por la que ahora que está retomando sus actividades quiere recibir ayuda profesional, pues es consciente de que no es normal que reaccione de una forma tan explosiva ante cualquier tipo de provocación.
Fuente: Tribuna