Ciudad de México.- No sólo las celebridades están expuestas la atención mediática; en muchas ocasiones su fama también arrastra a sus hijos a las críticas, como sucedió con los de Aracely Arámbula. Daniel y Miguel, de 15 y 17 años, robaron titulares noticiosos luego de que fueran captados por las cámaras mientras compraban cigarrillos afuera del teatro donde se presenta Perfume de Gardenias, obra en la que trabaja su madre.
Arámbula alzó la voz y mencionó que siempre defendería a los jóvenes de los ataques de comunicación. A la par, aseguró que ambos llevan una vida sana alejada de los vicios. A ella se unió Erika Buenfil, quien también es mamá y al igual que su colega, sabe lo que es lidiar con los juicios hacia los suyos. Recordemos que años atrás, las redes sociales señalaron a Nicolás, hijo de la famosa, por usar vestidos y subir videos con esos atuendos.
En ese caso, surgieron todo tipo de especulaciones acerca de las preferencias sexuales de Nicolás, quien, junto a su mamá, lograron sortear las ofensas y cuestionamientos. Ahora que Arámbula atraviesa los mismos aprietos, Buenfil salió a su rescate. En este sentido reconoció que los hijos de las celebridades "están en un foco constante" y explicó que el suyo sabe cómo manejar la situación porque desde pequeño se ha acostumbrado a dicho ambiente.
En cuanto a los hijos de 'La Chule', comentó que los dos muchachos "están empezando a experimentar" la presión social. Como consejo les recomendó no esconderse y se dijo convencida de que son hombres con muchos valores, inculcados por Aracely. Días atrás, la protagonista teatral reprobó el acoso por parte de la prensa, la cual grabó y difundió imágenes de los menores de edad sin su consentimiento.
Aracely se ha caracterizado por ser muy discreta con los detalles de la vida de sus hijos, por lo que considera de mal gusto que los reporteros se tomen libertades que no les corresponden. "Como leona voy a defender a mis cachorros, que son dos chiquillos muy sanos", dijo tajante. Finalmente, exhortó a los periodistas a no inventar chismes y a dejar en paz a Daniel y Miguel.
Fuente: Tribuna Sonora