Los Ángeles, California. – La vida personal de Britney Spears vuelve a ser noticia, pero esta vez no por su situación con su padre o con sus hijos, sino por la del hombre que actualmente es su novio. Paul Soliz, quien fue vinculado sentimentalmente con la estrella del pop, está en medio de un tormentoso divorcio que salpicó incluso a Spears. Según declaraciones de su suegra, Sandra Smith, Soliz se llevó a tres de sus hijos a vivir a la casa de la cantante, lo que generó una disputa familiar con la madre de los pequeños.
Smith, suegra de Soliz, reveló en una entrevista en el programa Drew Lane Show que su yerno, de 38 años, llevó a tres de sus hijos a vivir a la residencia de Spears en medio del proceso de separación con su hija, Nicole Mancilla. “Estamos tratando de recuperar a esos niños”, aseguró con preocupación durante la transmisión. Mancilla, quien estuvo casada con Soliz durante ocho años, solicitó formalmente el divorcio el pasado miércoles, marcando el fin de su matrimonio.
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De acuerdo con documentos judiciales presentados en marzo por los Servicios de Apoyo del Condado de Los Ángeles y obtenidos por el medio Page Six, Soliz tiene la responsabilidad de pagar mil 167 dólares mensuales en concepto de manutención infantil, además de cubrir la mitad de los costos de atención médica de sus hijos: Trystan, de 9 años, Dylan, de 8, y Violet, de apenas 1 año. Pese a sus obligaciones financieras, Smith aseguró que Soliz “no ha pagado la manutención de ninguno de sus hijos” y, a pesar de esto, “está tratando de mudarlos a todos a la casa de Spears”.
Pero esto no es todo, pues los documentos también indican que Soliz percibe ingresos mensuales de dos mil 773, mientras que Mancilla no cuenta con fuentes de ingreso registradas. Smith no se reservó críticas durante su intervención en el programa de radio y calificó a Soliz de “perdedor”. Según ella, Soliz afirmó sentirse “estresado” por las constantes recriminaciones de su suegra, quien lo llama “papá incumplidor” por su falta de apoyo económico.
Para quien no lo sepa, Paul Soliz y Britney Spears se conocieron en 2022, cuando él fue contratado como parte del personal de limpieza de la cantante. La relación entre ambos se intensificó a principios de este año tras la ruptura de Spears con su esposo, Sam Asghari, lo que puso a Soliz bajo los reflectores de la prensa.
Por su parte, Mancilla mostró su frustración con la relación de su todavía esposo con Spears. En mayo, la mujer arremetió contra Soliz a través de una entrevista con Daily Mail. “Mi esposo cayó en la m* de Britney Spears”, dijo molesta. “Estaba casado y ahora niega a sus hijos. Descuida a sus hijos por ella”.
Aunque la representante de Britney Spears no ha emitido declaraciones oficiales sobre el tema, la situación generó gran inquietud entre los seguidores de la artista, que temen que el polémico historial de Soliz y sus conflictos familiares afecten a la intérprete de Toxic, quien ha tenido una vida personal marcada por escándalos y dificultades.
Recientemente, Spears ha estado en el centro de la atención mediática tras la publicación de su autobiografía, The Woman in Me, donde detalla su tumultuosa relación con la fama, la tutela que la controló por más de una década y sus intentos por recuperar su autonomía. Ahora, con Soliz a su lado, el caos parece haberse reinstalado en su vida.
La relación de Soliz y Spears ha despertado críticas por parte de la madre de Mancilla, quien cuestiona las razones por las que la cantante podría sentirse atraída por su yerno, considerando su historial familiar y su papel en la vida de sus hijos. “Es un hombre que no cumple con sus responsabilidades. No entiendo qué vio Britney en él”, comentó Smith.
En medio de este drama, Spears sigue centrada en su carrera y en la promoción de su libro, mientras que Soliz deberá enfrentar cuestiones legales relacionadas con la manutención de sus hijos. Con esta nueva controversia en marcha, el futuro de la relación entre Spears y Soliz se ve incierto y bajo la atenta mirada de la opinión pública.
Fuente: Tribuna