Ciudad de México.- La imagen de Memo Aponte no ha logrado recuperarse y, en su lugar, tropieza cada vez más. Ahora, sus exnovias se juntaron en un podcast para compartir sus experiencias en relación con el famoso. Sus declaraciones sólo echaron más tierra a la carrera del youtuber. En el ya muy popular programa Hablemos de Tal, conducido por Un Tal Fredo, que reúne a mujeres famosas para que cuenten su historia de vida, acudió Mhoni Rosales y Shaddia Haddad para abrirse ante el público.
Ambas lo acusaron de diversas formas de maltrato no sólo ejercido hacia ellas, sino también en perjuicio de animalitos. Shadia Haddad afirmó que el creador de contenidos utilizaba gotas de marihuana para sedar a sus perritas y mantenerlas tranquilas durante la noche. "Para él, los perros son como objetos, algo que prefiere no escuchar ni ver cuando le resultan incómodos". También narró un episodio violento en el que el actor habría azotado a una de las perritas, llamada Sora, contra el suelo tras descubrir que había mordido un control remoto.
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Por su parte, Mónica, otra de las exparejas de Aponte, corroboró este patrón de comportamiento negligente y agresivo hacia sus mascotas. Además, explicó que tuvo casi tres años con él durante la pandemia. La influencer relató que su relación estuvo marcada por violencia psicológica y una constante manipulación. Aunque llevaban poco tiempo de conocerse y existía una diferencia de edad de seis años, decidieron vivir juntos. Según Mónica, Memo cubría todos los gastos del hogar, pero utilizaba esta situación para controlarla, restringir su estilo de vida y hacerle sentir una deuda hacia él.
Mónica también confesó que tuvo que abandonar sus estudios para ayudar a Memo en la creación de contenido. Además, mencionó que Aponte recurría a manipulaciones emocionales extremas, incluyendo amenazas de quitarse la vida. En una ocasión, incluso fingió haberse lanzado al vacío para asustarla.
De la misma manera, Haddad, explicó que vivió con Aponte. Una vez juntos, comenzaba a expulsarla de la casa cada vez que consideraba que ella había hecho algo "mal". Aunque Shaddia aclaró que nunca llegó a golpearla directamente, sí admitió que en una ocasión él la empujó. La madre de Shaddia tuvo que intervenir en varias ocasiones para proteger a su hija, ya que la relación estaba plagada de malos tratos e infidelidades constantes.
Fuente: Tribuna Sonora