Ciudad de México. - El Año Nuevo Chino, también conocido como la "Fiesta de la Primavera", es una celebración con más de cuatro mil años de historia que marca el inicio de un nuevo ciclo lunar. Este evento cultural, profundamente arraigado en las tradiciones chinas, es celebrado por aproximadamente una quinta parte de la población mundial, según datos de la Embajada de China en México.
Para quien no lo sepa, el 22 de diciembre de 2023, la Asamblea General de las Naciones Unidas aprobó una resolución histórica que designa al Año Nuevo Chino como un feriado oficial de la organización. Este reconocimiento subraya la importancia de esta festividad, no solo para China, sino también para las comunidades internacionales que la celebran.
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La Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) destaca la relevancia cultural del Año Nuevo Chino como una celebración que honra a los antepasados y fomenta la unión familiar. Además, se considera un momento propicio para desear fortuna, buena suerte y ahuyentar los malos espíritus que puedan amenazar el año que comienza.
En esta festividad, los rituales incluyen reuniones familiares, cenas tradicionales, decoraciones rojas y doradas que simbolizan la prosperidad, así como el famoso “sobre rojo” (hongbao), que contiene dinero como augurio de buena suerte para los niños y jóvenes.
El Año Nuevo Chino 2025 dará la bienvenida a la serpiente de madera, un signo asociado con la astucia, la prudencia y la elegancia. Según el horóscopo chino, las personas nacidas en años representados por la serpiente son conocidas por ser inteligentes y decididas, pero también celosas y posesivas.
Este signo ha marcado otros años como 1941, 1953, 1965, 1977, 1989, 2001 y 2013, repitiéndose cada 12 años en el ciclo del zodiaco chino. La serpiente de madera en particular simboliza resiliencia, creatividad y una conexión profunda con la naturaleza.
El horóscopo chino funciona con un ciclo de 12 años, cada uno representado por un animal del zodiaco: la rata, el buey, el tigre, el conejo, el dragón, la serpiente, el caballo, la cabra, el mono, el gallo, el perro y el cerdo. Estos signos están además vinculados con uno de los cinco elementos: madera, fuego, tierra, metal y agua, que aportan características adicionales al animal del año.
El reconocimiento del Año Nuevo Chino por parte de la ONU refuerza su importancia como una festividad que trasciende fronteras, uniendo a personas de diversas culturas en la celebración de la esperanza y la renovación.
En 2025, las celebraciones no solo darán la bienvenida al Año de la Serpiente de Madera, sino que también consolidarán esta tradición milenaria como un símbolo de diversidad cultural y conexión global.
FUente: Tribuna Sonora