Los Ángeles, California. - En medio de la controversia generada por la decepcionante participación de Usher en el Super Bowl 58, surgen especulaciones sobre Miley Cyrus como la próxima estrella encargada del espectáculo de medio tiempo en la siguiente edición del Super Bowl.
La noticia ha desatado la emoción de cientos de fanáticos de la cantante estadounidense, quienes ya han expresado su entusiasmo y han manifestado su deseo de que esta propuesta se haga realidad. Un video recientemente viralizado en las redes sociales muestra a Miley Cyrus sentada sobre una enorme bola de discoteca suspendida del techo del estadio de Las Vegas, acompañada de impresionantes efectos pirotécnicos y parte del espectáculo que podría formar parte del Super Bowl 59.
Las imágenes han generado una gran cantidad de reacciones en las redes sociales, con el ferviente fandom de Cyrus exigiendo que su participación en el espectáculo de medio tiempo se concrete. Cabe destacar que, antes de que Usher fuera anunciado como la estrella del show de medio tiempo, se rumoreaba que Miley Cyrus había sido contratada para dicho papel, aunque posteriormente se supo que declinó la invitación por motivos desconocidos.
La idea de ver a Cyrus en el Super Bowl no parece descabellada, ya que en 2021 la famosa formó parte del line-up del evento, aunque no como estrella principal, sino como parte del espectáculo de Billy Idol.
Por lo tanto, no se descarta que el próximo año sea Miley Cyrus quien lidere el espectáculo de medio tiempo del Super Bowl 59, posiblemente utilizando este escenario para promocionar su esperado álbum. Los fanáticos esperan ansiosamente confirmaciones sobre esta emocionante posibilidad.
Por otra parte, Usher se presentó en el Super Bowl junto a Alicia Keys y Ludacris el pasado 11 de febrero, procurando resumir sus 30 años de carrera en 13 minutos con un popurrí de canciones. Sin embargo, su actuación no fue bien recibida por el público, generando críticas en las redes sociales y llevando a algunos fanáticos a abandonar sus asientos en el estadio. Se consideró que el espectáculo fue aburrido y se criticó la elección del repertorio, que se centró en canciones populares en Estados Unidos en lugar de incluir éxitos internacionales. Además, la ausencia de Justin Bieber, previamente anticipada, también decepcionó a los fans.
Fuente: Tribuna