Ciudad de México.- A veces el café ya no ayuda: simplemente estamos cansados y apáticos. Si descansas bien y aún así te sientes drenado, debes sabes que existen otras razones para la falta de energía. Aquí enlistamos algunas de ellas:
1. Desayuno equivocado
Hay alimentos que roban energía al cuerpo por la mañana. Un croissant de chocolate te alegrará a corto plazo. Pero después el nivel de azúcar en sangre vuelve a bajar rápidamente y te debilita. Al contrario, los productos integrales se metabolizan más lentamente, lo que mantiene los niveles de azúcar en sangre más estables.
2. Deficiencia de nutrientes
Nuestro cuerpo también reacciona a la falta de minerales y vitaminas con fatiga. Nutrientes como el calcio, la vitamina C y el potasio son importantes para el metabolismo energético, el magnesio y las vitaminas B son importantes para los nervios. Si te sientes débil constantemente, debes comer verduras y frutas todos los días, como plátanos, naranjas, semillas de calabaza o brócoli. También se recomiendan los frutos secos naturales.
3. Altos niveles de ruido
Cada persona percibe los ruidos de forma diferente. Los ladridos de los perros molestan a algunas personas, el tráfico de coches molesta a otras. Estas fuentes de ruido no deseadas pueden cansarnos: los ruidos molestos ponen al cuerpo en alerta: liberamos hormonas del estrés, el corazón late más rápido, la presión arterial aumenta y la frecuencia respiratoria se dispara. Todo esto nos da sueño a largo plazo.
4. Hombres caídos
Los investigadores descubrieron que nuestra postura afecta los niveles de energía. Si nos mantenemos erguidos, automáticamente respiramos más profundamente y mejoramos nuestra ingesta de oxígeno. Eso nos da energía.
5. Pensamientos negativos
Los malos sentimientos y las dudas sobre uno mismo provocan agotamiento físico y mental. Mucha energía fluye hacia cosas negativas, lo que significa que no quedan recursos para la regeneración. Consejo: escribe experiencias hermosas en un diario de felicidad; esto mejorará su estado de ánimo nuevamente.
6. Sal de las rutinas
Quien pasa mucho tiempo sentado en la vida cotidiana debería recargar las pilas al aire libre. Aprovecha cada oportunidad que se te presente: hacer compras en bicicleta, hacer llamadas telefónicas al aire libre, arreglar el jardín delantero, hacer yoga al aire libre o jugar a la pelota al aire libre con los niños.
Fuente: Tribuna