Ciudad de México.- Se reportó que un famoso protagonista de novelas, quien trabajó en Televisa durante al menos 10 años, estaría enfrentando un difícil panorama luego de acabar preso porque lo declararon culpable de homicidio involuntario. Se trata del querido actor Pablo Lyle, quien presuntamente se encuentra hundido en una fuerte depresión mientras sigue purgando su condena en una cárcel de Florida, Estados Unidos.
El originario de Mazatlán arrancó su carrera en la empresa de San Ángel desde el año 2006 cuando participó en el melodrama Código postal y y luego estuvo en otros como Verano de amor, Una familia con suerte, Cachito de cielo, Por siempre mi amor, La sombra del pasado y Corazón que miente, donde varias veces tuvo el rol principal. Mientras que su último proyecto en Las Estrellas fue la novela Mi adorable maldición en 2017.
Actualmente, Lyle sigue cumpliendo su condena, luego de que en diciembre de 2022 fue sentenciado a pasar 5 años en prisión, sumado a un periodo de 8 años en libertad condicional por el homicidio involuntario del cubano Juan Ricardo Hernández, hombre de 63 años al que golpeó tras un altercado de tránsito en Miami en 2019. A poco más de un año de permanecer en la cárcel, una fuente cercana a la familia de Pablo reveló a TVNotas que el artista de 37 años no la está pasando nada bien.
Supuestamente Pablo está muy triste por la falta de comunicación y convivencia con sus hijos, Arantza y Mauro, debido a que Ana Araujo, su exesposa, no ha podido viajar con los pequeños a Miami tanto como él quisiera. "Está entrando en crisis. Me dicen su hermano y sus papás que cuando hablan con él no para de llorar. Extraña mucho estar con ellos y lo que más le preocupa es saber de sus hijos", detalló la persona cercana a la familia Lyle.
La revista indicó que su fuente explicó que el próximo verano, los menores podrían visitar a su papá, mientras que la defensa legal de Pablo sigue trabajando para que se le otorgue la libertad condicional y pueda pasar lo que resta de su condena en mejores condiciones. De la misma manera, la fuente explicó que por ahora Lyle trata de mantener la mente ocupada en actividades en la cárcel, pero le es imposible concentrarse.
Hace deporte y está en talleres. Pero le gana el sentimentalismo. Su mamá está muy preocupada porque siente que su hijo está cayendo en una depresión fuerte. No sabe cómo ayudarlo. Su hermano Jorge es quien está más al pendiente y el que viaja a verlo más seguido. También él compartió que le preocupa la salud mental de su hermano, porque no lo ve nada bien", comentó.
Hay que recordar que fue en marzo del 2019 cuando Pablo se vio involucrado en un altercado de tránsito mientras su cuñado lo trasladaba tanto a él, como a su exesposa e hijos al aeropuerto de Miami, momento en que el actor decidió bajar de la camioneta en la que viajaba junto con su cuñado y se enfrentó a Hernández. A pesar de que el histrión logró llegar al aeropuerto y regresó a México, se difundieron imágenes que demostraron que Pablo atacó al ahora occiso.
A partir de ese instante, Lyle pasó 3 años en arresto domiciliario, debido a que su juicio se pospuso en diversas ocasiones por varias circunstancias, entre ellas la pandemia, y fue hasta octubre de 2022 que fue declarado culpable del delito de homicidio involuntario y en diciembre del mismo año recibió su sentencia. Cabe resaltar que hasta el momento ni la defensa o familia de Lyle ha confirmado su difícil situación, pero se espera que lo hagan pronto.
Fuente: Tribuna