Ciudad de México.- Este 8 de abril de 2024 está ocurriendo un fenómeno astronómico notable: un eclipse solar. Este evento, en el cual la Luna pasa entre la Tierra y el Sol, es considerado por muchos como una maravilla cósmica. Sin embargo, diferentes religiones tienen sus propias interpretaciones y significados asociados con este fenómeno celestial.
En el cristianismo, consideran este fenómeno como una señal del "fin del mundo", tal como se profetiza en el segundo testamento de la Biblia, indicando el retorno de Jesucristo a la Tierra. La Biblia, en varias de sus menciones, alude al oscurecimiento del cielo, un motivo que ha llevado a algunos creyentes a interpretar los eclipses solares como eventos proféticos. Sin embargo, muchos académicos cuestionan estas interpretaciones, sugiriendo que provienen en su mayoría de ideas evangélicas estadounidenses.
Andrea L. Robinson, en un artículo publicado en Christianity Today, destaca que estas interpretaciones a menudo pasan por alto el hecho de que los eclipses solares son fenómenos astronómicos comunes que ocurren aproximadamente cada 18 meses en algún lugar de la Tierra, sin necesariamente tener consecuencias apocalípticas.
En el Islam, el profeta Mahoma enseñó que este fenómeno es una señal de Dios. El profeta animó a sus seguidores a recordar y adorar a Allah durante el eclipse, invitándolos a congregarse en la mezquita y rezar juntos hasta que pasara el evento cósmico. Para los musulmanes, el eclipse es un momento de contemplación y conexión espiritual, una oportunidad para recordar la creación y acercarse a Dios.
En cuanto al hinduísmo, se consideran como un mal augurio, basándose en las enseñanzas de la astrología védica. Según la astrología védica, un eclipse solar ocurre cuando el planeta sombra Rahu "devora" al Sol, lo que se interpreta como un momento de impureza espiritual. En respuesta a esto, muchos hindúes optan por realizar actividades destinadas a limpiar y purificar sus energías.
Por ejemplo, es común que antes de un eclipse solar, los hindúes realicen ayunos y se abstengan de consumir alimentos. Después del eclipse, se bañan para purificar sus cuerpos y espíritus. Además, en ciertas ocasiones, prefieren mantenerse vestidos durante el eclipse para evitar la absorción de energías negativas.
Fuente: Tribuna