Los Ángeles, Estados Unidos.- En esta semana, te hemos contado sobre la muerte de algunas estrellas que tuvieron su auge en los años 90, como es el caso de Martin Mull, actor de Sabrina, La bruja adolescente o Doug Sheehan, quien apareció en sitcom de hace 20 años, Despistadas. De nueva cuenta, toca traer una mala noticia a las personas que disfrutaban de la televisión hace casi 30 años, puesto otra gran artista ha dejado este mundo.
Se trata de Shanne Doherty, si bien es posible que este nombre no te suene, la realidad es que es más que probable que la recuerdes por su participación en series de drama adolescente como es el caso de Beverly Hills 90210, así como en su aparición en el programa de tintes de terror y sobrenatural, Hechiceras. Aunque abandonó ambos programas, la realidad es que su paso por ambos dejó una huella muy marcada, sobretodo en el último, donde dio vida a ‘Prue Halliwell’.
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Lamentablemente, los años de vida de Doherty fueron especialmente duros, puesto estuvo luchando contra el cáncer de mama que le fue diagnosticado en el año 2015. La artista procuró no darse por vencida y se esforzó mediante cirugías y tratamientos. Para el mes de abril del 2017, la estrella anunció con total felicidad que su enfermedad estaba en remisión, pero las cosas volvieron a complicarse para el mes de febrero del 2020, cuando confirmó para Good Morning America que su afección había vuelto en etapa 4.
De acuerdo con un comunicado lanzado a través de la revista People, gracias a su publicista Leslie Sloane, Doherty murió el pasado sábado, 13 de julio, después de luchar contra el cáncer. Según el documento, en el momento de su partida estaba rodeada de sus seres queridos, amigos y familiares, incluso su mascota ‘Bowie’ estaba en el recinto. Asimismo, se pidió a la prensa que permitan que los dolientes lleven su pérdida de manera privada y “en paz”.
Anteriormente, Doherty declaró para Good Morning America que recibir la noticia de que padecía cáncer, de nueva cuenta, la había dejado devastada, puesto constantemente se preguntaba “¿por qué a mí?”, para luego pensar que, realmente, nadie merece atravesar una enfermedad tan dura como es el caso del cáncer de mama. Aún a la fecha, Shanne es recordada por ser una de las estrellas más polémicas de finales de los 90 y principios de los 2000.
Fuentes: Tribuna