Ciudad de México- De nueva cuenta en Televisa estuvieron a punto de enfrentar una dura tragedia, pues la querida cantante y actriz, Dulce, recientemente tuvo una entrevista en exclusiva para el programa Hoy, en el que se sinceró sobre su estado de salud, confesando una terrible noticia con respecto a las consecuencias que enfrentó poco después de que perdió un riñón tras revelarse que tenía cáncer.
Este 2024 ha sido un año de malas noticias para la querida intérprete de Dama de Hierro, pero también de bendiciones, pues hace un par de meses le diagnosticaron un tumor canceroso, por el que le tuvieron que extirpar uno de sus riñones y así salvar su vida, sin embargo, no solo logró salir con éxito, sino que no debió de ser sometida a quimioterapias u otro tratamiento, puesto a que no tuvo metástasis y salió del hospital libre de esta enfermedad tan temida.
Ahora, tras varias semanas de su cirugía y de mantenerse reposando según las indicaciones médicas, la integrante de GranDiosas, brindó una entrevista en exclusiva para el matutino producido por Andrea Rodríguez Doria, en la que detalló que tuvo dos procedimientos, el primero fue por paraloscopía, en que el que despegaron el riñón e hicieron el procedimiento, y por último le cortaron para extirpar el órgano junto a su tumor, el cual midió 21 centímetros por 11 de ancho, pesaba dos kilos y medio, asegurando que "fue básicamente una cesárea2.
De igual forma, la intérprete de Déjame Volver Contigo, recordó que tras la cirugía tuvo una complicación muy severa, pues perdió la memoria tres días, en los cuales sufrió una terrible angustia, ya que estaba sola y no recordaba como usar el celular para hacer la llamada, y que de igual forma, no se acordaba de nadie que pudiera ir a su auxilio: "Fueron tres días en los que realmente estuve muy mal, porque además perdí la memoria los tres días. Quería pedir ayuda y no podía, porque no sabía abrir el teléfono. Cuando logré abrirlo, después no me acordaba de los nombres que leía de las personas".
Finalmente, la también actriz recalcó que el tumor sí era maligno, por lo que tenía cáncer en su riñón, y si no necesitó de más tratamiento fue porque gracias a Dios las células que transportan la enfermedad estaban bien encapsuladas en el tumor y no se esparcieron más allá de ello: "Era un tumor maligno, además, que afortunadamente estaba bien encerrado y no tuve metástasis, ni gracias a Dios, ni una célula cancerosa se había salido, así que estoy feliz de un nuevo comienzo".
Fuente: Tribuna del Yaqui