Ciudad de México.- A meses de vivir el golpe más fuerte de su vida, al enterarse que al que consideraba el amor de su vida, Augusto Bravo, le fue infiel con la mujer de su ex, la actriz Adianez Hernández, la reconocida histrionista de Televisa y teatro, Larisa Mendizábal, acaba de brindar una entrevista para TV Notas en la que abrió su corazón y se mostró devastada tras enterarse de que se habían casado a menos de un año de haberle causado tanto dolor.
La boda de Adianez y Bravo ocurrió a solo unos días de que se cumpla un año de que Rodrigo Cachero confirmara que estaba pasando por un "infierno" al enterarse que su entonces pareja y madre de sus dos hijos menores, le fue infiel con Augusto, que era pareja de la progenitora de su hijo mayor, siendo un doble engaño. En aquel entonces Larisa hizo un en vivo de su cuenta de Instagram y ahogada en llanto confirmó lo dicho por su ex, destacando que estaba desecha e incluso meses después, reveló que iba a terapia.
Pero, cuando todo parecía que tomaba su cause y las aguas se calmaban, la exparticipante de Survivor México y Augusto confirmaron que llegaron al altar con una ceremonia a la orilla del mar, en donde se juraron amor eterno, volviendo a generar un sin fin de comentarios. Ahora, a través de una entrevista con TV Notas, Larisa rompió el silencio al respecto, y declaró que no le sorprende que se casaran, ya que "su modo de operar" es hacer todo "muy rápido".
Con total sinceridad, Mendizábal confesó que le ha costado mucho trabajo el superar esta situación, especialmente por pensamientos como "me vio hecha pomada y no le importó", destacando que ella considera que al haber estado 11 años juntos, amándose deberían de haber significado algo, pero ya entendió que "a él le vale un cacahuate lo que yo sentía". Con respecto a Adianez, la actriz declaró que ella prefiere no tener que verla nunca, pero en caso de que se llegara a dar el momento, únicamente daría la media vuelta y se iría del lugar.
La exesposa del actor de TV Azteca mencionó que este proceso de olvidar a Augusto y extrañarlo ha sido lo más difícil que le tocó vivir, debido a que en realidad al inicio no entendía que él le había puesto el cuerno, solamente sentía dolor al extrañarlo y lloraba todo el tiempo: "Después me cayó el veinte. Fue ahí cuando comenzó mi enojo. Llegué a pensar: 'Si alguien me hubiera dicho que ayer era la última noche que dormí con él, lo hubiera abrazado más'".
Mendizábal también negó rotundamente que Bravo le diera manutención, sino que en realidad cuando firmaron el acuerdo del fin del concubinato, este se comprometió a apoyarla económicamente, aunque desconoce si sea por 11 años, que fue lo que estuvieron juntos. Por último, señaló que se fue a hacer unos análisis con su ginecóloga para saber si no tenía alguna enfermedad de transmisión sexual, señalando que la doctora le hizo saber que la puso en un gran riesgo, pero que afortunadamente estaba sana.
No estoy lista para tener galán. He vivido un proceso muy duro y en lo último que pienso es en conocer a alguien. No se me antoja. Si llego a estar con alguien en un futuro, me gustaría estar perfectamente sana para no echarle mis heridas del pasado", concluyó.
Fuente: Tribuna del Yaqui