Ciudad de México.- Arturo Islas Allende, conductor, actor y ambientalista mexicano, se volvió tendencia en redes sociales luego de realizar una denuncia pública en la que mencionó que, aparentemente, él y toda su familia fueron víctimas de una terrible agresión física en un evento privado en CDMX. Además, señaló que los responsables podrían ser personas que se identifican como animalistas.
De hecho, no es la primera vez que se habla de Islas Allende, ya que hace un tiempo se le relacionó con tráfico de especies. Asimismo, diversas figuras públicas, como los creadores de contenido Yael Ruiz y Luis Potro Caballero, aseguran que realiza prácticas cuestionables; sin embargo, hasta el momento de la elaboración de esta nota no se ha comprobado ningún rumor en contra del famoso.
"Cuando la libertad de expresión se convierte en mentira, difamación, agresión y manipulación, deja de ser libertad. Hoy le tocó a mis hijos. Así como he apoyado innumerables casos de maltrato animal, causas sociales y recaudaciones de fondos para personas enfermas en México y en otros países, hoy le pido a esta hermosa comunidad que cerremos filas. Que me apoyen, pero sin generar violencia. La verdad se defiende con hechos, no con odio", aseveró en un escrito publicado en Instagram.
Además, adjuntó un video en el que contó que, en los últimos dos años, ha sido insultado con numerosos términos despectivos, pero decidió mantenerse en silencio para evitar generar más violencia digital. No obstante, se animó a relatar una mala experiencia que vivió el pasado 27 de septiembre, al finalizar un evento privado en la Ciudad de México, cuando cuatro personas ingresaron con identificaciones falsas y, además de agredirlo a él, también atacaron a sus hijos.
"No hay justificación para exponer a menores a ese tipo de violencia. Aún más preocupante es que estas personas usaron identificaciones falsas para entrar y agredirme. Lo triste es que quienes lo hicieron se hacen llamar animalistas; duele ver cómo personas que dicen defender la vida la vulneran de esa forma", afirmó, para después agregar que nadie debería pasar por algo semejante.
Responden sobre los hechos
Mediante un correo, Sofía Morín, que es parte del grupo de personas animalistas, narró los hechos a TRIBUNA como parte de su derecho de réplica, siendo la siguiente información:
"El día 27 de septiembre, un grupo de cuatro mujeres animalistas que formamos parte de diversos grupos y hemos trabajado por años a favor de los animales en rescates, cambios legislativos como la regulación de corridas de toros en CDMX, denuncias contra el Mercado de Sonora, presión para que las diversas instituciones en el país trabajen a favor de los animales y más. Entramos al evento público de Jane Goodall en la Universidad Anáhuac en el Estado de México; contrario a lo que se afirma en redes, todo fue con credenciales reales y no falsas, todo con el objetivo de compartirle a Jane Goodall una carpeta con información acerca de Arturo Islas y de su vínculo con traficantes de animales en México, de quien Arturo es socio y más.
Cabe resaltar que las únicas agresiones que hubo fueron contra algunos animalistas que intentaron ingresar y, sin motivo alguno, se les prohibió el paso y además se les jaloneó. Al finalizar el evento, ya con luces apagadas y gente saliendo del foro, una activista le entregó a Jane Goodall dicha carpeta llena de información. Enseguida algunas personas comenzaron con discursos para exponer ante el público algunas actuaciones de Arturo sobre su pasado y presente. A su vez, otras personas gritaron algunas consignas cerca del foro. Es importante aclarar que durante este suceso, los menores de edad hijos de Arturo e incluso su esposa, ni siquiera estaban en el auditorio; tenemos videos de cómo antes de este suceso ellos estaban fuera del foro donde acontecieron los hechos. Igualmente, Arturo iba saliendo del lugar, segundos antes de que comenzara la protesta contra Arturo.
En ningún momento hubo agresiones contra nadie, menos contra menores de edad, que además no deberían ser expuestos en redes sociales por ningún motivo; ni siquiera nos sacó a fuerza el personal de seguridad de la Universidad Anáhuac a causa de que todo fue completamente pacífico.
Cabe resaltar que ya hay acciones legales contra Arturo; no todo ha sido limitarse a exponer ante la gente con evidencia el tema que vendía mini pigs. Le gustaba la cetrería (motivo por el que tiene múltiples fotos con animales muertos), socio de personajes a los que se les han encontrado animales sin legal procedencia, como Ernesto Zazueta en zoológicos como Ostimuri y EcoParc Colima".
Fuente: Tribuna del Yaqui
