Ciudad de México.- Después de enfrentar terrible tragedia de haber perdido a su hijo, el reconocido actor de Televisa acaba de dar una inesperada noticia de su familia.
En el año del 2018, Ferdinando y Brenda anunciaron con suma felicidad que estaban en la dulce espera de gemelos y en el mes de mayo del 2019, con gran felicidad celebraron el nacimiento de sus dos pequeños, Dante y Tadeo Valencia Kellerman. Por desgracia, la emoción y felicidad de ser padres se vio opacada cuando ambos bebés enfermaron gravemente, resultando en el fallecimiento del pequeño Dante, con solo tres meses de nacido.
Ahora, a poco más de seis años de esta situación, a través de su cuenta de Instagram, compartió un video, en el que declaró que tras la prueba más difícil de su vida, en la que se sumieron en una gran depresión, ahora, quería declarar que nunca había podido soñar con su bebé Dante, pero una noche antes de su sexto aniversario luctuoso pudo hacerlo, destacando que para él, es un mensaje de que "el amor es más grande que cualquier pérdida", y finalmente sintió paz: "Creo que nuestro niño nos mandó un mensaje de que podemos volver a soñar en grande y lo queremos compartir con ustedes".
Ante esto, señaló que se encuentra en la dulce espera de su "bebé arcoíris", y como fans siempre han estado con él en cada triunfo y en cada tristeza, incluso en la pérdida profunda que le dejó su pequeño Dante, que les enseñó a "valorar cada día". Ahora, en el video, declaró que a seis años de todo este largo camino de aprender a vivir con ese dolor, podía decir que "el destino y nuestro angelito nos regalan desde el cielo una nueva oportunidad y un mensaje milagroso que queremos compartir con ustedes, nuestra segunda familia".
Finalmente, tras compartir el emotivo video en el que él y Brenda muestras su prueba de embarazo con resultado positivo, y como entre lágrimas mostraban su miedo a ilusionarse de nuevo, externaron con el corazón en la mano, que esto no borra el dolor del pasado, pero sí les permitirá terminar de sanar: "Este bebé no borra el dolor de haber perdido a nuestro amado niño, pero es la prueba de que su amor es una energía eterna que nos sigue protegiendo. Es el mensaje que necesitábamos, una segunda oportunidad para sanar".
Fuente: Tribuna del Yaqui
