Los Ángeles, Estados Unidos.- La polémica actriz de origen mexicano, Martha Higareda, a través de sus redes sociales ha confesado que en estas últimas semanas estuvo al borde de la muerte, pues tras haber dado a luz a sus gemelas, pasó lo que tanto temían, y sufrió de preeclampsia, la cual no solo la tuvo en observación por horas, sino que en el último mes la regresó al hospital dos veces.
El pasado 18 de noviembre, Martha y Lewis Howes presumieron el nacimiento de sus dos nenas, de las que aún no revelan nombres, y aunque el empresario estadounidense se dijo feliz y emocionado, confesó que la actriz de Amores Perros y su segunda bebé sufrieron complicaciones. Ahora, este 16 de diciembre, Martha mediante su cuenta de Instagram ha confirmado que tuvo preeclampsia.
A través de un video en el que mostró sus momentos en el hospital tras dar a luz, la actriz de No Manches Frida también compartió un mensaje en el que afirma que con una profunda gratitud debe confesar que por obra de Dios está viva, así como una de sus pequeñas, pues una estuvo en cuidados intensivos, casi el mes y ahora están en casa: "Días después, mi esposo me llevó de urgencia a la sala de emergencias: mi presión arterial llegó a 215. Estuvieron casi 6 horas intentando estabilizarme. El diagnóstico: preeclampsia. En este mes y medio volví dos veces a emergencias", agregó.
La exintegrante de ¿Quién es la Máscara?, confesó que estuvo debatiéndose entre la vida y la muerta, pues estuvo muy grave todas esas seis horas en la que su presión no se estabilizaba, pese a todos los esfuerzos de sus médicos para tratar de mantenerla con ellos en este mundo: "Viví una experiencia espiritual en donde se me mostró qué ocurriría si me quedaba o partía. Y en ese espacio, recé. Y sé que Dios y El rosario me salvaron. Mi esposo sostenía mi mano y Jesús sostenía mi corazón", confesó.
Finalmente, Martha declaró que Dios fue el que le dio una segunda oportunidad, que su presión se estabilizó después de su rosario y dejar su corazón en manos de Jesús, por lo que ahora no tenía más que agradecimiento a Dios, al rosario, a sus padres, amigos y familiares que le prestaron su fuerza y no la dejaron sola en este importante lucha, así cómo a sus médicos por monitorearla de cerca: "Sé que Dios y el Rosario salvaron mi vida y por eso estoy profundamente agradecida", concluyó.
Fuente: Tribuna del Yaqui
