Nueva York, Estados Unidos.- Un reciente crimen ha sacudido a la opinión pública y a los residentes del condado de Queens, en Nueva York, pues la madre de un oficial de policía fue brutalmente asesinada tras recibir un par de balazos de forma directa, todo justo en el momento en que la occisa salió a atender el llamado a la puerta.
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De acuerdo con los primeros reportes, la mujer identificada como Anna Torres, de 51 años de edad, se encontraba en su departamento cuando la tarde del 4 de mayo, al rededor de las 14:30 pm, alguien tocó a la puerta de su domicilio ubicado en la Avenida 109, por lo que al abrir, recibió dos disparos en la cabeza.
Al momento del ataque, dos familiares más de la occisa se encontraban en el inmueble, por lo que de inmediato salieron a ver qué sucedía y la sorpresa fue ver a Torres en el suelo envuelta en sangre.
A pesar del llamado a las autoridades y cuerpos de emergencia, la mujer fue declarada muerta, por lo que además de acordonar el sitio y levantar los restos, se inició una investigación a fin de conocer los motivos por los que había sido ultimada, pues no se trató de un intento de asalto.
Tras analizar la escena del crimen, se develó que el pistolero podría tratarse de Giuseppe Canzani de 41 años de edad quien, previo al asesinato, había sido detenido por elementos de la Comisaría 106, lugar donde se desempeña como oficial de policía el hijo de la fémina y, tras ser liberado, abandonó el lugar a bordo de un Chevy Traverse color negro, vehículo que se ubicó en el inmueble donde la Torres fue asesinada y donde se ve al sujeto salir huyendo.
Se cree que, a modo de venganza por haber sido detenido, el pistolero buscó la manera de atacar al oficial de policía involucrado en el arresto y por ello, arremetió en contra de uno de sus familiares, en este caso, la madre del uniformado.
Aunque se tiene esta línea de investigación, la Policía de Nueva York reveló que se seguirá analizando el posible nexo entre ambos, pues el sospechoso no cuenta con antecedentes penales y se ha mencionado que Canzani acusó a la occisa de ser una "bruja", pues se sabe que ésta tenía el hábito de leer las cartas del Tarot, lo que derivó en recibir este calificativo, al tiempo de ser señalada por el agresor de haberlo hechizado.
Fuente: The New York Post