Washington, Estados Unidos.- Al mantener bajo custodia a 59 mil inmigrantes en centros de detención distribuidos por todo el país, el servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) de Estados Unidos alcanzó un récord histórico, según datos internos Este número supera el máximo anterior registrado en 2019, durante la primera administración de Donald Trump, cuando la cifra llegó a 55 mil detenidos.
De acuerdo con la información, los datos muestran que casi la mitad de las personas detenidas no tiene antecedentes penales, mientras que menos del 30 por ciento ha sido condenado por algún delito. La mayoría de los arrestos recientes se realizaron en el interior del país, marcando un cambio importante en comparación con la administración de Joe Biden, cuando las operaciones de detención estaban enfocadas en la frontera.
Además, las recientes redadas en lugares de trabajo y otras áreas públicas han generado controversia, sobre todo, en la zona de Los Ángeles, donde las acciones del ICE desataron protestas masivas. Los enfrentamientos llevaron al gobierno de Trump a desplegar a la Guardia Nacional y a los Marines para proteger propiedades federales y garantizar la seguridad de los agentes involucrados.
Cabe señalar que, el aumento de las detenciones también se atribuye a la reactivación de estrategias pausadas, como redadas en lugares de trabajo y colaboraciones con agencias como la CBP, el FBI y la DEA. Este enfoque agresivo ha permitido al ICE realizar hasta 2 mil arrestos diarios en algunas jornadas recientes, casi duplicando el promedio de 660 detenciones diarias registrado en los primeros días del segundo mandato de Donald Trump.
Por otro lado, el gobierno ha explorado opciones para expandir la capacidad de los centros de detención. Entre las propuestas se encuentra la conversión de bases militares, como Fort Bliss en Texas, en instalaciones temporales para inmigrantes. Además, Florida ha ofrecido construir nuevos centros de detención, incluido uno apodado ‘Alligator Alcatraz’ en los Everglades, con financiamiento federal.
Este aumento en la población detenida ha generado preocupaciones sobre las condiciones dentro de los centros de detención. Austin Kocher, experto en migración de la Universidad de Syracuse, expresó su inquietud por la capacidad del ICE para garantizar estándares básicos de detención y el debido proceso legal para los inmigrantes, calificando estos aspectos como obligaciones legales desatendidas.
Pese a las críticas, el gobierno de Donald Trump continúa impulsando su agenda migratoria, respaldada por propuestas legislativas como el proyecto de ley ‘One Big Beautiful Bill’, que planea financiar hasta 100 mil camas adicionales para la detención de inmigrantes.
Fuente: Tribuna
