Mazatlán, Sinaloa. - El estado de Sinaloa enfrenta una preocupante crisis de seguridad derivada de los enfrentamientos entre las facciones de Los Chapitos y Los Mayitos del Cártel de Sinaloa. Este conflicto no solo ha incrementado la violencia, sino también el número de desapariciones en la región. Entre las víctimas más recientes se encuentra el empresario inmobiliario Sergio Roberto Guzmán, quien lleva más de una semana desaparecido.
Sergio Guzmán fue visto por última vez el pasado 9 de enero cerca de La Marina, en Mazatlán, alrededor de las 16:00 horas. Según la Comisión de Búsqueda, el empresario vestía una camisa de lino blanca con franjas azules, pantalón caqui, zapatos cafés y cinturón del mismo color.
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Por su parte, la familia de Guzmán, particularmente su hija Samantha Guzmán, creadora de contenido en Mazatlán, ha pedido ayuda a las autoridades y la comunidad para localizarlo. En un emotivo video, Samantha destacó que su padre padece enfermedades cardíacas y diabetes, por lo que el tiempo es crucial para su localización.
Asimismo, la influencer solicitó apoyo al gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha Moya, y a la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, además de convocar a sus seguidores y a los habitantes de Mazatlán para sumar esfuerzos en la búsqueda.
Entre el 9 de septiembre y el 13 de enero, Sinaloa registró 658 desapariciones, según datos de la Comisión de Búsqueda. Más del 60% de estas personas siguen sin ser localizadas, mientras que 20% han sido halladas sin vida, reflejando una escalada alarmante de violencia y desapariciones en la entidad.
El panorama de inseguridad se agrava con el secuestro de Luis Alberto, un agente de la Policía de Investigación de la Fiscalía General del Estado de Sinaloa. Luis Alberto, de 45 años, fue privado de su libertad la mañana del miércoles en el sector Cañadas, en Culiacán.
El hecho ocurrió antes de las 8:00 horas, en la privada Victoria, cerca de una escuela primaria y una clínica del IMSS. En el lugar, las autoridades encontraron a un menor, presuntamente hijo del agente, quien quedó bajo resguardo.
Lamentablemente la violencia en Sinaloa sigue cobrando vidas y generando incertidumbre entre sus habitantes. Las desapariciones y ataques a figuras públicas, como empresarios y miembros de la policía, subrayan la necesidad urgente de reforzar la seguridad en la entidad.
Mientras tanto, las familias de las víctimas claman por justicia y apoyo en la búsqueda de sus seres queridos, esperando que la coordinación entre los diferentes niveles de gobierno pueda brindar respuestas y soluciones.
Fuente: Tribuna