Ciudad de México.- Después de que el hijo del exboxeador Julio César Chávez fuera detenido en Estados Unidos por agentes del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE por sus siglas en inglés) el pasado 3 de julio, la Fiscalía General de la República (FGR) confirmó que Julio César Chávez Jr. Tiene una orden de aprehensión desde marzo del 2023, esto después de que las autoridades estadounidenses hicieran pública la orden para la deportación del mexicano.
¿Qué cargos enfrenta en México?
El boxeador que acaba de ser derrotado en su pelea con el youtuber Jake Paul en el Honda Center de Anaheim, California, enfrentará en el país los cargos por presuntos delitos que implican tráfico de armas, delincuencia organizada y los posibles vínculos que conserva con el Cártel de Sinaloa. Los cuales se encuentran señalados como una Organización Terrorista Extranjera (OTE). Por lo que, según la publicación hecha por FGR, el deportista se encuentra en proceso de deportación.
Según las autoridades americanas, el detenido ya había ingresado legalmente en agosto de 2023 con una visa B2, que venció en los primeros meses de 2024; después, argumentando su matrimonio con Frida Muñoz, quien es ciudadana estadounidense, tramitaría una solicitud de residencia permanente. Aunque la relación pasada de ella con el hijo de 'El Chapo', Édgar Guzmán López, encendió las alarmas de los agentes, además del vínculo que Chávez Jr. Admitió tener con Ovidio Guzmán, otro de los hijos de Joaquín Loera.
¿A cuántos años de cárcel podría ser condenado?
Mientras que se han demostrado los vínculos que el acusado tiene con personas ligadas al crimen organizado, de acuerdo con lo estipulado en la Ley Federal contra la Delincuencia Organizada, si se comprueba que Julio César Chávez Jr. Si ejercía funciones de administración, dirección o supervisión dentro de alguna estructura criminal, como el Cártel de Sinaloa u otros, podría alcanzar una condena de entre 20 a 40 años de prisión.
Por otro lado, si solo llegase a ser probada la participación sin algún rol de tipo directivo, la condena bajaría a solo de 10 a 20 años, esto según la misma ley. Aunque a la condena podrían ser agregados los cargos por el presunto tráfico de armas, por el cual serían de entre 7 a 30 años de cárcel.
Siendo que en territorio estadounidense ya había sido arrestado en 2024 por posesión y fabricación de un arma, esto podría utilizarse como agravante en un juicio en México; también, tomando en cuenta que las leyes mexicanas permiten la acumulación de condenas si son delitos distintos, los años en prisión podrían llegar a alcanzar la suma de 70 años de prisión, en un escenario extremo.
Fuente: Tribuna
