Ciudad Obregón, Sonora.- Una noticia que sacudió el mundo de los deportes y se ha hecho viral en las últimas horas es el retiro de Dusty Baker como manager de las Grandes Ligas. Dicha decisión llega después de que los Astros de Houston cayeran ante los Rangers de Texas y se quedaran a una victoria de alcanzar la Serie Mundial por tercer año seguido. El legado del estadounidense quedará marcado para siempre en el 'Rey de los deportes', específicamente en la MLB y en la Liga Mexicana del Pacífico, en donde también tuvo participación.
Baker comenzó su aventura en el beisbol invernal de México, durante el año 1970, a sus tiernos 21 años, después de que había debutado en las en el Big Show con los Bravos de Atlanta, vino a jugar con los Yaquis de Ciudad Obregón. En dicha organización de Sonora participó en 33 juegos, 130 turnos al bat, 34 hits, cinco dobletes, tres jonrones, 17 producidas, 14 bases , 22 ponches y promedio de bateo de .262.
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El exestratega de los Astros además de mostrar su calidad en el 'diamante', en la LMP es recordado porque fue parte de un compromiso histórico el 5 de enero de 1971, cuando alineó en el jardín central durante el Juego Perfecto que lanzó Vicente 'Huevo' Romo en la victoria 12-0 de 'La Tribu de Cajeme' sobre los ahora desaparecidos Ostioneros de Guaymas.
“Para mí, la Liga Mexicana del Pacífico ha sido la liga de mayor dificultad para batear. Me lanzaban picheo rompientes en cualquier conteo y desde todos los ángulos del brazo. En México, me tocó ver jugar al que considero a uno de los tres más grandes bateadores que ha tenido el béisbol en toda su historia, ellos son: Hank Aaron, el japonés Sadaharu Oh y el mexicano Héctor Espino”, dijo Baker en una entrevista
Aunque su paso con los Yaquis no fue muy duradero, Baker tendría después una destacada carrera en MLB, siendo parte importante en la Serie Mundial que los Dodegrs de Los Ángeles le ganaron a los Yankees de Nueva York en 1981. Pero sin duda alguna su mejor momento deportivo lo vivió como manager, ya que Dusty terminó su carrera en el noveno puesto de victorias como manejador con 2.183 en 4.046 encuentros de temporada regular. Fue el décimo segundo mánager en la historia de las Grandes Ligas que alcanzó la 2.000 victorias y el primer afroestadounidense en lograrlo.
El nacido en California se despidió con marca de 320-226 con su más reciente equipo, los Astros, llevándolos a la postemporada en sus cuatro campañas, ganando dos títulos de liga y una Serie Mundial. Baker fue mánager de San Francisco, Cachorros de Chicago, Cincinnati y Washington antes de llegar al equipo en donde brilló, los Astros de Houston.