Kansas City, Estados Unidos.- Hay muchas personas a las que les encantaría vivir la vida de Travis Kelce en estos días. Es una auténtica estrella de la NFL que juega para los Kansas City Chiefs, dos veces campeones defensores del Super Bowl.
Aparece en todos lados, desde programas de televisión hasta anuncios publicitarios, y resulta que está saliendo con la estrella pop más grande del planeta.
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Sin embargo, cuando Kelce recuerda sus días de infancia, siempre quiso ser como... ¿Josh Allen?
Sí, Kelce siempre se imaginó a sí mismo jugando detrás del centro, al igual que el mariscal de campo de los Bills, haciendo grandes jugadas con su brazo y piernas en la NFL. Pero resultó que nunca tuvo el talento de Allen para el brazo, así que en algún momento del camino un entrenador muy previsor lo cambió a ala cerrada, y ha resultado ser uno de los mejores en esa posición en la historia del deporte.
“Josh es quien yo soñaba ser en la NFL”, dijo Kelce el viernes, después de una práctica final antes de que sus Chiefs se enfrenten a Allen y los Bills en el Arrowhead Stadium el domingo por la noche en un juego de campeonato de la AFC que tiene todos los ingredientes de una pelea de peso pesado.
Mucho respeto
“Un quarterback grande y atlético. Un brazo fuerte. Poder ser un tipo de doble amenaza”, continuó Kelce, casi con nostalgia. “Su capacidad para hacer de todo, se nota, realmente tomó al toro por los cuernos y fue su líder en el frente, y lo canalizó. Los muchachos entran y salen del edificio y él es el tipo principal que los hace avanzar, y tengo mucho respeto por ese tipo”.
Sin duda, hay algunas similitudes entre ambos. Kelce mide 1.96 metros y pesa 113 kilos, lo que es ideal para un ala cerrada, mientras que Allen mide 1.96 metros y pesa 109 kilos. Ambos brillaron en universidades que a menudo tienen dificultades para ser el centro de atención, Kelce en Cincinnati y Allen en Wyoming. Y ambos han seguido manteniendo a sus equipos cerca de la cima del orden jerárquico de la NFL.
Los Chiefs están en el juego de campeonato de la AFC por séptima temporada consecutiva. Los Bills regresan por segunda vez en cinco temporadas, tratando de vengar una derrota por 38-24 en el Arrowhead Stadium en 2021 que impulsó a Kansas City a un triunfo en el Super Bowl.
Una opción
Si bien Kelce no tiene el gran brazo de Allen, ciertamente puede girarlo. Lanzó para 1.523 yardas con 15 touchdowns mientras corría para 1.016 yardas y 10 anotaciones más en su último año en Cleveland Heights High School en Ohio.
Incluso ha tenido un par de oportunidades en partidos de la NFL. Durante un enfrentamiento de 2020 con los Raiders, lanzó un pase de 4 yardas que le permitió conseguir un primer intento. La semana siguiente contra Tampa Bay, Kelce tuvo otra oportunidad, pero lanzó un pase incompleto.
Luego están los pases fuera de guión. Kelce ha llenado un video completo de jugadas destacadas en las que atrapa el balón, hace pases laterales a otra persona y la ve correr para ganar más yardas. Son momentos que hacen que el entrenador de los Chiefs, Andy Reid, y el buen amigo de Kelce, Patrick Mahomes, se queden sin palabras, pero él se ha ganado la libertad de hacer jugadas tan audaces.
“Lo hace en los entrenamientos”, dijo Mahomes con una sonrisa, “y empezó como una especie de broma, y ahora se ha convertido en algo habitual. Mientras lo complete, el entrenador le seguirá permitiendo hacerlo. Pero él sabe las consecuencias si no lo hace”.
No por ahora
Es poco probable que Kelce haga algo demasiado loco contra los Bills, que lideraron la NFL en diferencial de pérdidas de balón esta temporada. Pero los Chiefs sin duda obtendrían otra actuación clásica en los playoffs como la que tuvo en la ronda divisional contra Houston.
Kelce, de 35 años, atrapó siete pases para 117 yardas y un touchdown en la victoria 23-14 el fin de semana pasado.
Hubo mucha gente que pensó que Kelce estaba acabado después de una temporada regular por debajo de su nivel, en la que aun así tuvo 97 recepciones para 823 yardas. Esos críticos dijeron que ya no estaba concentrado en el fútbol, que Kelce pasaba demasiado tiempo frente a las cámaras de televisión y viajando por el mundo con su novia, Taylor Swift. Y que debe estar llegando al final del camino.
Kelce lo escuchó todo, por cierto. Pero no le inmutó en lo más mínimo.
“Me río”, dijo. “Está bien, hombre. Mientras salgamos a la cancha y ganemos, eso es todo lo que importa”.
Fuente: Tribuna