Reino Unido.- Después de la polémica en la que Meghan Markle y el Príncipe Harry involucraron a la Corona por supuesto "racismo", ahora es otro nieto de la Reina Isabel II la que creo un nuevo escándalo en la realeza, pues la Policía del Reino Unido lo investigó por supuestamente haber cometido grave falta a sus leyes.
Como se sabe, todo el país liderado por Isabel II se encuentra en un estricto confinamiento a causa del Covid-19, por lo que sus fronteras están cerradas y se deben cumplir varios requisitos para poder trasladarse de una ciudad a otra o para entrar de otro país.
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Es por ello que agentes federales abrieron una investigación hacia Peter Phillips, nieto de la soberana e hijo de la Princesa Ana, ya que de su finca Gatcombe Park en Londres, se fue hasta el pueblo de St. Cyrus en Escocia, donde se alojó con una amiga de su hermana Zara Tindall, Lindsay Wallace, viajando 700 kilómetros al país fronterizo.
Vecinos de Lindsay al ver que Peter llegó a su hogar llamaron a varios agentes, los cuales se presentaron en el domicilio y abrieron una pequeña investigación para saber los motivos que lo hizo moverse de tan lejos, por lo que hicieron varias preguntas y verificaron los datos con autoridades de su ciudad.
Al descubrirse que los motivos de su traslado fue por cuestiones profesionales, ya que es uno de los socios en XF Medical, donde realizan pruebas rápidas de coronavirus, que cumplió todas las restricciones y llegó con Wallace debido a que los hoteles están cerrados, terminaron con su investigación, pues "no se encontró ningún incumplimiento de la legislación".
Fuente: Hola