Los Ángeles, Estados Unidos.- Es posible que existan miles de personas en el mundo que sueñen con la glamurosa vida de las estrellas de cine, pero en más de una ocasión diversos famosos han salido a desmentir esta idea y aseguran que ser un actor o cantante reconocido no es precisamente lo mejor del mundo. Tal y como le ocurrió al a prolífica actriz, Jennifer Lawrence, quien a sus 22 años debutó en la franquicia de Los Juegos del Hambre, misma que la lanzó a la fama a nivel internacional.
Exactamente 1 año después, el nombre de la histrionista estuvo en boca de todos tras convertirse en ganadora del Oscar en la categoría de mejor actriz por el filme, Los Juegos del Destino. Si bien, en las pantallas de miles de personas, la celebridad de Operación Sparrow lucía glamurosa y feliz por haberse hecho de la codiciada estatuilla a una edad tan joven, lo cierto es que no se sentía del todo feliz por su logro.
Y es que, este sábado, 8 de octubre, la protagonista de No mires arriba brindó una entrevista para el medio London Film, en donde habría reconocido que, debido a su rápido ascenso a la fama comenzó a perder su propia identidad, incluso reconoció que dejó verse a sí misma como a una persona y comenzó a percibirse como un producto del que dependía todo su equipo de trabajo, por lo que se volvió muy cuidadosa con cada decisión que tomaba.
Entre el estreno de 'Los juegos del hambre' y ganar el Oscar, me convertí en una mercancía tan importante que sentí que cada decisión era una decisión de un grupo muy grande
Durante la misma charla, la actriz de Pasajeros y la saga de X men días pasados futuros reconoció que no logra recordar lo que hizo en los años siguientes a su coronación como la mejor actriz del año 2012, porque experimentó una "pérdida de control", misma que espera poder recuperar con el pasar de los años, ya que, aún en la actualidad es un problema con el que debe lidiar, aunque afirma que comenzó a mejorar después del nacimiento de su bebé a quien procreó con el galerista Cooke Maroney.
Jennifer Lawrence expresó que, probablemente, esta afección la comenzó a desarrollar prácticamente desde el inicio de su carrera y es que, según sus palabras se entregó de lleno a la actuación desde que tenía 18 años y, a partir de entonces, continuó filmando películas de manera constante, por lo que expresó su esperanza de que, ahora que tiene 32 y cuenta con una familia propia, podrá recuperarse completamente.
Fuentes: Tribuna