Londres, Inglaterra.- Como ya muchos habían previsto, la docuserie de Meghan Markle y el Príncipe Harry representó una severo golpe para la Familia Real Británica, quienes tras dos días del estreno del promocional ya envió su primera acusación en contra de los Duques de Sussex, ¿la razón? Presuntamente, haber introducido un camarógrafo privado al Palacio de Buckingham sin el permiso de la difunta Reina Isabel II.
Como algunos recordarán, en el trailer se pueden apreciar varias fotografías en blanco y negro de diversas vivencias de la actriz de Suits y el royal pelirrojo, una de ellas supuestamente habría sido captada dentro del Palacio de Buckingham y se puede apreciar a la pareja dando la espalda a la cámara, mientras caminan en dirección hacía el jardín, en tanto un lacayo les abre la puerta, si bien, esta acción sería inofensiva en una situación normal, resulta ser que la pareja violó un protocolo real.
Según información del tabloide británica, Daily Mail, existe una regla que dicta que cualquier persona puede filmar o tomar fotografías en el hogar del monarca de Reino Unido, siempre y cuando cuente con el permiso del soberano en cuestión, en este caso, los duques debieron enviar una carta a Isabel II para contar con su consentimiento, pero al parecer no siguieron el protocolo, lo que podría meterlos en problemas.
Créditos: Netflix
De acuerdo con datos del Telegraph, la fotografía que aparece en el promocional de Netflix con duración de un minuto, causó gran indignación en el personal del Palacio de Buckingham y ya se encargaron de enviar una queja por escrito. Por otro lado, se estima que la imagen fue tomada durante la gira de despedida por Reino Unido de los duques de Sussex y se teoriza que no fueron advertidos de esta norma.
Cabe señalar que, fuentes cercanas a la Familia Real, afirman que Carlos III está dispuesto a exiliar a su hijo menor, en caso de que en el documental o en sus memorias lance advertencias en contra de su esposa, Camilla Parker Bowles. Incluso afirman que el Rey está dispuesto a perdonar cualquier ofensa de su hijo, pero no tolerará que sea demasiado crítico con el tema de su ruptura con Diana o su relación extramarital con la actual Reina Consorte.
Fuentes: Tribuna