República Dominicana.- Ayer viernes, llegó a su fin el reality show Soy famoso ¡sácame de aquí, en el que los artistas demostraron sus mejores habilidades en diversas pruebas en medio de la selva. Uno de los concursantes favoritos para ganar el programa de TV Azteca era Oskarín, miembros de Los Destrampados, y aunque demostró grandes habilidades, se conviertió en el décimo eliminado quedándose a solo un paso de la victoria.
Frente a las cámaras de televisión, el comediante dijo que haría algo histórico ya que se retiraría el maquillaje para que todos conocieran el verdadero rostro que da vida a Oskarín, uno de los payasos más queridos de la farándula mexicana. Al observar como poco a poco el famoso se quitaba el maquillaje y los accesorios, la conductora Atala Sarmiento rompió en llanto ya que confesó que el momento logró conmoverla.
Después de mostrara su verdadero rostro, sus compañeros le dieron un aplauso, a lo que él dijo: "Alguien me dijo que también tenía que ser aplaudido quien esta atrás. Y soy yo, yo soy Oscar Gutiérrez quien interpreta a Oskarín". Pese a los problemas que tuvieron durante reality show, antes de retirarse, el comediante no dudó en despedirse de Alfredo Adame a quien le recomendó visitar a sus hijos y abrazarlos.
Sin duda, Oskarín fue uno de los mejores participantes de esta primera edición de Soy famoso ¡sácame de aquí, tanto por lo que hizo en los retos como por carisma y entrega. Como se recordará, alcanzó gran parte de su fama después de consolidarse como parte fundamental del matutino Venga la Alegría, lo que le permitió acumular miles de fans que quedaron en shock después de que se desprendiera del programa.
Por último, el ganador del reality fue Alfredo Adame, quien no solo es un experto en las artes marciales, también demostró ser un gran estratega y un guerrero para sortear las inclemencias de la selva, luego de varias semanas de competencia. Tras su victoria, el polémica conductor señaló que el premio en efectivo, de 1 millón de pesos, lo donará a una fundación de pelucas para niñas con cáncer.
Fuente: Tribuna