Guadalajara, Jalisco.- El pasado mes de marzo, la dinastía Fernández volvió a vivir momentos de jubilo por el nacimiento de Mía, la primogénita de Alex, hijo del 'Potrillo', esto después de que la afamada familia sufriera el duro golpe de la pérdida de Vicente Fernández, quien lamentablemente falleció el pasado 12 de diciembre, luego de haber estado internado durante algún tiempo en un hospital de Guadalajara, Jalisco.
Como era de esperarse, la pequeña Mía es la 'luz de los ojos' de Alex y del mismo Alejandro Fernández, quien no pudo resistirse a compartir fotografías de su nieta, misma que ha presumido en más de una ocasión, junto a Cayetana, su nieta mayor. La menor de los Fernández celebró en la playa su cuarto mes de vida, junto a sus padres, quienes derritieron el corazón de sus seguidores tras publicar un video en donde sumergían los pies de la infante en el mar.
Sí bien, aquel momento habría sido un momento feliz para los nuevos padres, lo cierto es que no todo puede ser dulce en su vida, tal y como se demostró la mañana de este martes, 26 de julio, cuando compartieron una fotografía de Mía, quien aparentemente tenía los ojos llorosos y se encontraba en el médico ¿la razón? Según información incluida en la propia cuenta de Instagram de la menor, debido a que recientemente cumplió 4 meses, sus progenitores tuvieron que llevarla a ponerle sus vacunas, motivo por el que la bebé tenía un semblante de ligera molestia.
De acuerdo con información del Centro de Prevención y Enfermedades Contagiosas de Estados Unidos (CDC, por sus siglas en inglés), cuando un bebé cumple los 4 meses es necesario ponerle las vacunas de difteria, tétanos y tosferina o pertussis; también se les debe inocular la de haemophilus influenzae tipo b, poliomelitis, neumocócicas y rotavirus, todas en ellas en su segunda dosis. Tras ello, es posible que, el menor en cuestión, presente algunos efectos secundarios leves como dolor en el área de la inyección o salpullido.
Fuentes: Tribuna, Instagram @mia.fernandez.h, CDC