Londres, Inglaterra.- Hace poco más de una semana, Reino Unido sufrió un duro golpe, después de que quien fuera su monarca por 70 años perdió la vida en su palacio de Balmoral, Escocia. A lo largo de estos ocho días, han surgido diversas declaraciones de la casa real, entre ellos se puede mencionar al ahora rey Carlos III, el príncipe William y el duque de Sussex, Harry; sin embargo, el hijo menor de la soberana, el conde Eduardo se mantuvo en silencio, hasta ahora.
Como algunos sabrán, la Reina Isabel II tuvo un total de cuatro hijos: Carlos, Ana, Andrés y Eduardo, este último asumió el cargo de Conde de Wessex, a quien se le vio notablemente afectado por el fallecimiento de su madre, posible razón por la que, probablemente, no se le vio realizar ninguna declaración hasta 1 semana y 1 día después de que se dio el anuncio oficial sobre el fallecimiento de la hija de Jorge VI.
El mensaje del Conde fue distribuido por las redes sociales del Palacio de Buckingham, en él comentó algo que muy pocos miembros de la realeza habían declarado y es que, cuando se crece con un padre monarca, el menor debe aprender a compartir a su progenitor con todo un poblado, caso que ocurrió con los cuatro hijos de la Reina, quienes crecieron mientras veían a su madre en juntas parlamentarias y giras.
Como familia, hemos crecido aprendiendo a compartir a nuestros padres, especialmente a nuestra querida mamá, con la Nación, sus Reinos y la Commonwealth. Si bien ha sido maravilloso haber pasado un tiempo despidiéndonos en privado en Balmoral, ahora es el momento de permitir que otros puedan despedirse. Nos ha abrumado la marea de emociones que nos ha envuelto y la gran cantidad de personas que se han esforzado por expresar su propio amor, admiración y respeto a una persona especial y única que siempre estuvo ahí para nosotros", declaró el royal
Cabe señalar que, el Conde Eduardo no se encontraba en el palacio de Balmoral cuando la Reina Isabel II dio su último aliento, de hecho los únicos que acompañaron a Elizabeth durante sus últimas horas de vida fueron el entonces príncipe Carlos y la princesa Ana, mientras que Andrés, William y Harry tuvieron que tomar un avión para llegar rápidamente a ver a la matriarca, lamentablemente llegaron muy tarde, aunque sí tuvieron toda una noche para poder velar a la soberana de manera privada y sin la intervención de los medios de comunicación.
Fuentes: Tribuna