Los Ángeles, Estados Unidos.- En la farándula, ha habido varios artistas que, con el pasar de los años, cambian radicalmente su aspecto, ya sea porque suben o bajan de peso, de manera extrema. Tal fue le caso de Brendan Fraser, Adele, Adamari López, Omar Chaparro y Thalí García, mismos que por tal o cual razón llegaron a sorprender al mundo por la manera en la que cambiaron su aspecto físico.
Una de estas estrellas fue Jessica Simpson, quien llegó a subir cerca de 45 kilos, después de que dio a luz a sus hijos: Maxwell, Ace y Birdie. Durante una entrevista, la estrella de Dukes of Hazzar, That 70's Show y La Dimensión Desconocida (2003) llegó a mencionar que tuvo que guardar mucha ropa que anteriormente se ponía porque debido al subidón de peso tuvo que dejar de usarla. También declaró que los comentarios negativos de las personas la llegaron a herir profundamente.
Sin embargo, a partir del año 2019, la también cantante decidió tomar las riendas de su salud y comenzó a cuidarse mucho más. Simpson reveló que sí bien, hace ejercicio más seguido, lo que realmente la ayudó a bajar de peso fue el cambiar sus hábitos alimenticios, por lo que tuvo que acudir con una nutricionista para que le impusiera una dieta compuesta por tres comidas al día entre las que se incluyen batidos y algunos snacks.
Jessica confirmó que desde que comenzó a cuidar de sí misma dejó de lado, casi al 100 por ciento a la comida chatarra, aunque de vez en cuando consume algunos dulces e incluso rosquillas: "Me siento absolutamente saludable", declaró Simpson. La atractiva rubia señaló que tras tener a sus hijos tuvo una revolución hormonal, pero luego de que comenzó a comer saludable e implementó el ejercicio en su vida, notó que ganó más energía y dejó de tener dichas alteraciones, al grado de sentirse como antes de quedar embarazada por primera vez.
Fuentes: Tribuna