Alta Saboya, Francia.- El 5 de septiembre del 2012, la familia británica, al-Hilli, perdió la vida tras ser brutalmente baleada en el interior de un automóvil. Después de nueve años del ataque, las autoridades francesas aún no han detenido a nadie.
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Los hechos ocurrieron cuando la familia al-Hilli se encontraba de vacaciones en la región francesa Alta Saboya, en las cercanías del lago Annecy. En el lugar se encontraba el ingeniero Surrey Saad, de 50 años; su esposa, de 47 años; su suegra, Suahalla al-Allaf, de 74 y las tres hijas del matrimonio.
De acuerdo con la reconstrucción de los hechos, un sujeto o una banda de asaltantes, arribaron al lugar, por lo que la familia intentó escapar rápidamente en su automóvil BMW, todos fueron baleados en el sitio, a excepción de Hillis y Zeena, ambas de cuatro años, ellas lograron esconderse en el espacio de los pies del vehículo y resultaron ilesas. Sin embargo, la hija mayor, Zainab, de siete, no tuvo la misma suerte; fue golpeada y acribillada junto con sus padres, aunque ella no falleció, y sobrevivió al asalto.
En las cercanías, había un ciclista francés, llamado Sylvain Mollier, de 45 años, él también falleció aquel día, ya que, recibió siete balazos a quemarropa, pero se desconoce sí tenía alguna relación con la familia.
Tras nueve años, la policía aún no ha detenido a ningún sospechoso por los hechos anteriormente narrados.
Fuentes: Mirror