Oklahoma, Estados Unidos.- Tras asesinar a su vecina a puñaladas, Lawrence Paul Anderson, de 42 años, le extirpó el corazón y lo sirvió de comer a su familia para 'liberar sus demonios'.
El sospechoso, que ahora podría enfrentar la pena de muerte por triple homicidio, estuvo preso en 2017 y, aunque su condena era de nueve años, pudo salir mucho antes.
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En enero de 2021, Anderson salió bajo libertad condicional tras cumplir poco más dos años en prisión por ofensas relacionadas con portación de armas y drogas.
El hombre fue recibido por sus tíos: Leon y Delsie Pye, donde vivió hasta el pasado 9 de febrero, día en el que acabó con la vida de tres personas y dejó herida de gravedad a otra.
Aquel día, Lawrence entró a la casa de su vecina, Andrea Lynn Blankenship. Tomó un cuchillo, la apuñaló hasta matarla y le arrancó el corazón. Más tarde, cocinó la carne con papas y la sirvió a su familia.
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Según se lee en un documento de la corte escrito por agentes que atendieron el caso, el hombre alimentó a la familia para "liberar sus demonios".
Después atacó a tres integrantes de su familia: sus tíos y una pequeña de 4 años que era nieta de sus tíos. En la agresión solo sobrevivió Delsie, a quien le clavó un cuchillo en ambos ojos.
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Sobre el hecho, se desconocen las causas por las que Anderson agredió a su familia y a su vecina. Durante su juicio se limitó a decir: "No quiero derecho a fianza, su señoría. No quiero derecho a fianza".
Anderson enfrenta tres cargos por asesinato en primer grado y dos por asalto y lesiones con un arma letal. Su juicio es llevado por el juez distrital del Condado de Grady, Jason Hicks.
Fuente: Daily Mail