Florida, Estados Unidos.- Alegray Jones confesó el asesinato del hijo de su novia, un niño de 2 años a quien golpeó, arrojó y asfixió hasta que perdió el conocimiento tras irritarse porque se orinó sobre su sillón.
Jones dijo a la Policía que, en lugar de reportar el caso, le envió un mensaje de texto a su novia (madre del menor) a las 11 de la noche, mientras estaba en el trabajo.
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La madre le hizo una videollamada a Jones y este le mostró que el niño no estaba reaccionando. En ese momento salió de su trabajo, llamó al 911 y se apresuró por llegar a la casa de su novio.
Momentos después, la Policía llegó al lugar para brindarle los primeros auxilios al niño y llevarlo de inmediato a un hospital, donde lo reportaron muerto al poco tiempo.
Durante el interrogatorio, Jones detalló a los oficiales que le gritó al niño, lo tomó de un brazo y una pierna y lo arrojó contra un colchón inflable donde el menor vomitó.
Después lo jaló del colchón y lo presionó contra su propio cuerpo. Le colocó los brazos alrededor del estómago y lo apretó. Luego llevó al niño al baño donde volvió a vomitar.
Jones volvió a poner al menor en el colchón inflable aún consciente. Según relata, el niño comenzó a ir y venir a la sala. Más tarde, al revisarlo, se dio cuenta que el pequeño no reaccionaba.
Durante la autopsia, las autoridades revelaron que el menor tenía múltiples heridas visibles en diversas partes del cuerpo. La causa de muerte fue por trauma causado por golpes contundentes.
Fuente: Fox News