Nueva York, Estados Unidos.- Ana Uglow, de 17 años, no habría sufrido un paro cardiaco si le hubieran prescrito antibióticos días antes de que muriera en Nueva York, durante un viaje escolar.
La adolescente, estudiante de la escuela Bristol Grammar, se sintió mal desde una semana antes de que colapsara en su cuarto de hotel y fuera pronunciada sin vida en el hospital Mount Sinai el 19 de diciembre de 2019.
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Una investigación judicial reveló que la joven -quien aspiraba a entrar a la Universidad de Oxford- le comentó a su familia sobre sus preocupaciones debido a que sentía que no era tomada en serio por su maestro cuando le dijo que tenía problemas para respirar en el Empire Estate.
Información del Servicio Médico Forense de la ciudad de Nueva York informó que Uglow había muerto de bronconeumonía y sepsis que complicaron una infección respiratoria por influenza.
El médico Chris Danbury, un doctor que consulta en el área de cuidados intensivos, describió a la fallecida como una joven saludable y en forma sin un pasado médico significativo.
Creo que ella era tratable hasta el punto en el que sufrió el ataque cardiaco", refirió.
Fuente: Daily Mail