Londres, Inglaterra.- En junio de 2020, el brutal ataque de Stefan Setepenre Dennis contra otro automovilista captó la atención de miles de personas. Casi un año después, la justicia ha girado una sentencia en su contra por más de 13 años.
El hecho ocurrió cuando Stefan conducía en la ciudad de Vauxhall, al suroeste de Londres. De un momento a otro, cambió abruptamente de línea, lo que provocó que el auto que iba detrás lo chocara.
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La colisión fue menor, pero el enojo mayúsculo. Tanto Stefan como el conductor de la otra unidad se liaron a palabras hasta que el acusado subió al auto contrario y lo condujo hasta el pavimento.
Cuando actuó de manera violenta, el otro conductor sacó su teléfono y comenzó a grabar. Tras dejar su auto en el pavimento, Stefan se acerco a su víctima, le quitó el celular y lo arrojó al suelo antes de alejarse manejando.
Sin embargo, minutos después volvió a pie con una botella de cerveza de vidrio con la que le hizo varias cortadas en la cara que le dejaron horribles cicatrices de por vida.
Tras el ataque, Stefan protagonizó una persecución policial que terminó con el sospechoso detenido. Casi un año después del hecho, la justicia lo condenó a 13 años y seis meses de prisión.
Fuente: Metro UK