Colombo, Sri Lanka.- Como lo había prometido, este miércoles 13 de julio el presidente de Sri Lanka, Gotabaya Rajapaksa, presentó su renuncia al tiempo que abandonó el país en compañía de su esposa y dos agentes de seguridad quienes lo dirigieron a las Maldivas a bordo de un jet militar, todo en el marco en que las protestas continuaban en incluso, se reveló que los manifestantes habían tomado las oficinas del primer ministro, Ranil Wickremesinghe quien, tras ser elegido como presidente interno, también le han pedido que renuncie.
Fue el pasado sábado 9 de julio cuando los protestantes irrumpieron en la residencia oficial del presidente quien luego de haber sido escondido para proteger su integridad, prometió que su renuncia sería presentada este día 13 del mes en curso, algo que cumplió con la finalidad de detener las protestas que desde hace meses se han mantenido en el país asiático debido a que actualmente hay una crisis económica sin precedentes, la cual ha llegado a su punto más critico pues debido a la inflación, la hambruna ha azotado a la ciudadanía.
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Medios internacionales han resaltado que los manifestantes hicieron caso omiso no solo a la declaratoria de estado de emergencia, sino que además dejaron pasar por alto el ser rociado con gases lacrimógenos y este día, irrumpieron las barreras impuestas por los militares ingresando así a la oficina del primer ministro a quien al igual que a su residente, han exigido que dimita al cargo.
Del mismo modo, los grupos antigubernamentales irrumpieron en las principales cadenas de televisión y tuvieron una participación en las diferentes emisiones donde adelantaron, no habría orden pese a la petición del primer ministro quien instó a los cuerpos militares a "hacer lo necesario" para controlar a los manifestantes, quienes incluso no se detuvieron tras ser rociados con cañones de agua, dejando claro que había caos en todo el país.
"Los manifestantes quieren impedir que cumpla con mis responsabilidades como presidente en funciones. No podemos permitir que los fascistas tomen el control", destacó el primer ministro Wickremesinghe.
A modo de proteger a la ciudadanía, se declaró toque de queda hasta nuevo aviso, en especial para los residentes de la provincia occidental de Colombo donde las concentraciones son mayores; no obstante, se ha hablado que las manifestaciones son más un acto de celebración por la renuncia del presidente de quien se conformó, había aterrizado en Maldivas y posteriormente llevado a un sitio no revelado para proteger su integridad. "Hubo momentos de tensión pero al fin y al cabo todo terminó bien", dijo a los medios una fuente cercana al ahora expresidente.
"La gente está muy contenta, porque esas personas robaron a nuestro país", destacaron testigos que confirmaron no eran protestas sino festejos.
Fuente: Tribuna