Pensilvania, Estados Unidos.- En una macabra ironía, un bombero perdió a sus hijos, suegros, cuñados y sobrinos en un terrible incendio que azotó la casa de sus familiares. De acuerdo con algunos informes, el siniestro se desató alrededor de las 2:30 horas de este viernes, 5 de agosto, y debido a la velocidad en que se propagaron las llamas, ninguno de los vecinos logró evitar que el fuego se expandiera, lo que concluyó con la muerte de 10 personas.
Los hechos ocurrieron en el noreste de Pensilvania, Estados Unidos, en la comunidad de Nescopeck, según algunas indagatorias, las llamas comenzaron en el garaje del domicilio y rápidamente se expandió por todo el lugar. Se estima que el siniestro surgió luego de una explosión, esto según información brindada por algunos vecinos que se despertaron luego de escuchar el estruendoso ruido, tras ello, dos personas se acercaron e intentaron llamar a la policía, por otro lado uno de los locatarios intentó llevar su manguera para apagar las llamas, pero no logró aminorar el incendio.
Por su parte, la Compañía de Bomberos Voluntarios de Nescopeck tomó el caso, por lo que salieron rápidamente, entre ellos se encontraba Harold Baker, quien en primera instancia no reconoció el inmueble al que se dirigía como un sitio familiar, ya que, le habían dado la dirección de una vecina, pero las cosas cambiaron cuando entró por la calle y se percató de que las llamas salían de la casa de sus suegros.
Según información brindada por Baker, en el domicilio vivían 14 personas, de las cuales 10 perdieron la vida, entre ellos tres menores de 5, 6 y 7 años de edad, algunos adolescentes y un hombre de 79 años. Harold declaró que entre las víctimas fatales se encontraban sus dos hijos, su suegro, cuñados, tres nietos y otros dos familiares. Cabe señalar que, sus pequeños, no vivían en el domicilio, sino que habían ido a visitar a sus abuelos por las vacaciones de verano.
También informó que en el domicilio habitaban 13 perros, pero se desconoce sí alguno de ellos logró sobrevivir al incendio. Por otro lado, el fiscal de distrito del condado de Luzerne, Sam Sanguedolce declaró que el siniestro se está manejando como un incidente y no como un crimen, ya que, hasta el momento no hay evidencia de que el fuego haya sido provocado por algún externo. Por su parte, Baker fue relegado de sus actividades como bombero por unos días. Al incidente sobrevivieron tres personas y se desconoce el estado del cuarto involucrado.
Fuentes: Trubuna