Nueva York, Estados Unidos.- La mañana de este miércoles 18 de enero, la Administración Federal de Aviación confirmó que dos aviones que se encontraban en el aeropuerto John F. Kennedy protagonizaron un accidente, evento por el cual se dijo, no hubo pasajeros lesionados, al tiempo que tampoco se registraron daños materiales; sin embargo, se adelantó una investigación ya que no es la primera vez que un evento así se presenta en los últimos días.
En más detalles, se dijo que el incidente de este miércoles involucró a una aeronave de la empresa JetBlue que partía congestiono a San Juan, Puerto Rico como parte del itinerario del vuelo 1603, el cual golpeó la cola de otro avión de la misma aerolínea que por fortuna estaba vacío y estacionado en la pista destinada para este despegue. El incidente tuvo lugar en punto de las 07:00 horas, tiempo local.
Como indica el protocolo, se procedió a verificar no solo el estado de ambas aeronaves, sino que a la vez se indagó en el estado de salud de los pasajeros quienes resultaron ilesos. Aunque no hubo daños materiales ni pérdidas humanas, se dijo que ambas aeronaves tipo Airbus 320 ya no estarían en servicio hasta que el personal verificara que todo estaba en orden. En cuanto a los pasajeros afectados, tuvieron que abordar otro vuelo para continuar con su trayecto.
El pasado viernes 13 de enero, también en el aeropuerto de Nueva York se registró un incidente similar, esta vez fue el vuelo 1943 de la empresa Delta Air Lines el cual tenía como destino República Dominicana; sin embargo, mientras despejaba estuvo a punto de colisionar contra otra aeronave que estaba en la pista, por lo que la torre de control le indicó de manera abrupta que cancelará el despegue pues de lo contrario, las consecuencias serían fatales.
"¡Delta 1943, cancele la autorización de despegue!. Delta 1943, ¡cancela la autorización de despegue!", dijeron las autoridades.
Pasajeros de la aeronave en cuestión remarcaron que luego de haber recibido tal indicación, se registró una brusca sacudida del avión que estaba cancelando el despegue en ese momento. "Y luego hubo un silencio total durante un par de segundos", destaco un pasajero que dio su testimonio a medios locales. De acuerdo con las autoridades, en este caso el piloto compartió la información con los afectados, evento que algunos agradecieron pues así se tenía más certeza de lo que realmente pasaba.
En total 145 pasajeros viajaban a bordo del avión que estuvo apunto de colisionar y a todos ellos se les proporcionó apoyo, no solo para poder abordar otra aeronave, sino que además la empresa les otorgó apoyo medico en caso de requerirlo, así como alimentación y hospedaje, ya que el itinerario se retrasó por este evento. Ambos incidentes están siendo investigados por las autoridades para descartar cualquier tipo de complot.
Fuente: Tribuna