Atenas, Grecia.- A poco menos de 24 horas de haberse reportado un intenso choque entre un tren de pasajeros contra un convoy que transportaba mercancías, mismos que transitaban entre la capital griega, Atenas y Tesalónica, las autoridades confirmaron este miércoles 1 de marzo que la cifra de decesos ya subió a 36, mientras que las personas lesionadas son 85. Cabe remarcar que los datos fueron además confirmados por el Departamento de Bomberos, dependencia que atendió la emergencia de manera inmediata.
A través de una rueda de prensa, el portavoz de Bomberos de Grecia, Vassilis Vathrakogiannis, informó que entre las personas lesionadas, 66 habían tenido que ser llevadas de urgencia a hospitales cercanos, al tiempo que informó que seis de ellos se encuentran en terapia intensiva, por lo que fue enfático respecto a que las cifras oficiales son solo con base a un nuevo balance, dejando abierta la posibilidad de actualizara con el paso del tiempo.
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Hasta ahora, las autoridades locales no han revelado cuál fue el motivo por el cual las locomotoras se impactaron de esta manera, pues basta recordar que mediante las redes sociales es que se han compartido las imágenes que muestran cómo fue que quedaron las mismas; incluso, se observa que los primeros vagones de ambos trenes terminaron pulverizados. Se sabe que el tren de pasajeros contaban con un total de 350 personas en su interior.
Mediante redes sociales también se ha permitido observar que algunos de los vagones de ambas unidades terminaron volcados, lo que llevó a que rescatistas se valieran de escaleras para poder llegar hasta donde estaban los lesionados y así poder sacar a los supervivientes de esta desgracia. Una vez que se hizo oficial la nueva cifra de personas sin vida, las autoridades reiteraron los tres días de luto previamente declarados.
Por el momento, se sabe que cerca de 150 bomberos, 40 ambulancias y una docena de rescatistas independientes se trasladaron a Lárisa para atender la emergencia, la cual ha sido calificada por los intérnalas como una de las más graves sucedidas en la región. "Sentimos la colisión como un gran terremoto. Fue una pesadilla lo que viví", dijeron supervivientes a los medios internacionales tras los hechos.
Fuente: Tribuna