Roma, Italia.- Cada 17 de enero, los creyentes católicos celebran a San Antonio de Abad, un monje a quien se le ha adjudicado la protección de los animales y claro, las mascotas en general, motivo por el cual aquellos que profesan la fe católica asisten a los templos para que los sacerdotes bendigan a los animales de compañía siendo la única fecha en la cual se les permite el ingreso a los recintos religiosos; sin embargo, pese a que la Iglesia no está peleada con bendecir a los animales, al parecer el Papa Francisco ya no está muy de acuerdo con la situación pues recientemente se negó a hacer lo propio con un perro.
De acuerdo con la información oficial, el líder del Vaticano perdió la paciencia con una mujer quien se acercó a él para pedirle bendecir a "su niño", no obstante, para ella tenía este rol en su núcleo familiar la mascota y no un infante, por lo que el Papa de origen argentino narró la anécdota durante su más reciente charla con la Presidenta del Consejo de Ministros de Italia, Giorgina Meloni durante el foro 'Estados Generales de la Natalidad'.
El pontífice reveló que la mujer le explicaba que para ella, la mascota era considerada como "su hijo", lo que lo llevó a criticar su manera d pensar pues recordó que de manera inmediata le dijo: "Señora, muchos niños sufren hambre y usted con el perrito…", por lo que no quedó claro si tras estas palabras terminó por complacer a la fémina o por el contrario, fue motivo para negarle más la bendición que tanto estaba pidiéndole.
Debido a que el foro en el que el Papa participaba abordaba el tema de la natalidad y la crisis que actualmente enfrenta Italia al respecto, el Santo Padre lamentó que en la actualidad las familias perciban el hecho de traer hijos al mundo como una carga, por lo que los jóvenes terminan con una mentalidad condicionada y por ello, las nuevas generaciones terminan con miedo e incertidumbre sobre el hecho de traer familia al mundo.
Pese a las críticas que el Papa Francisco haya recibido por criticar que la mujer pidiera la bendición para "su niño2, también reconoció en el mismo foro que lo que urge es crear políticas en todo Europa con visión de futuro, al tiempo que se evite que las mujeres deban verse obligadas a elegir entre su vida profesional o la maternidad, evento que muchas dejan a un lado y se privan de la oportunidad de traer a un ser humano al mundo.
Son las que más sufren, las mujeres jóvenes, a menudo obligadas a elegir entre la carrera profesional y la maternidad, o aplastadas por la carga de cuidar de sus familias, sobre todo en presencia de ancianos frágiles y personas dependientes, dijo.
Algunas de las comunidades en Italia ofrecen a las familias pago por diversas cantidades no solo para pillar pueblos que se creen puedan quedar en el abandono, sino que además la cifra se incrementa si se tiene uno o hasta dos hijos, lo que además de permitir que las comunidades no "desaparezcan", también permite combatir la crisis de natalidad en dicho país europeo. Hasta el 2022, se tuvo un registro de 392 mil 598 bebés, lo que fue una cifra baja en comparación con años anteriores.
Fuente: Tribuna / Euronews