Washington, Estados Unidos.- Tras una reciente ofensiva militar contra instalaciones nucleares en Irán, Estados Unidos ha incrementado su nivel de alerta de seguridad nacional. Según el boletín emitido por el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) el 22 de junio de 2025, aunque no existe una amenaza específica, el entorno de amenaza es considerado el más elevado en años.
De acuerdo con la información, las autoridades temen que actores violentos o simpatizantes iraníes puedan planear ataques en territorio estadounidense como respuesta a los bombardeos liderados por el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump durante la operación ‘Midnight Hammer’.
Cabe señalar que, los ataques, dirigidos a neutralizar las capacidades nucleares de Irán, se realizaron en lugares importantes, como Fordow, Natanz e Isfahán, y han intensificado el conflicto en Medio Oriente. Esta acción fue una respuesta a la escalada iniciada por Israel con su operación ‘Rising Lion’. Ante esto, el secretario de Estado, Marco Rubio, advirtió que cualquier represalia iraní sería un error, destacando la disposición de Estados Unidos para intervenir nuevamente si es necesario.
Por su parte, las agencias de inteligencia estadounidenses, incluido el FBI, han redoblado sus esfuerzos para monitorear posibles amenazas internas, prestando atención a las denominadas ‘células durmientes’, grupos que pueden permanecer inactivos por largos periodos y representan un riesgo al pasar desapercibidos en la sociedad hasta que reciben órdenes para actuar. Desde el asesinato del general iraní Qasem Soleimani en 2020, Estados Unidos asegura haber desarticulado múltiples complots respaldados por Irán, sin embargo, la vigilancia sigue siendo crítica.
Además, funcionarios como Tom Cotton, presidente del Comité de Inteligencia del Senado, han expresado preocupación sobre la vulnerabilidad de Estados Unidos a posibles atentados. Por su parte, el vicepresidente JD Vance cuestionó las políticas migratorias, argumentando que el ingreso de iraníes al país durante los últimos años complica la identificación de posibles infiltrados. Rodney Scott, comisionado de Aduanas y Protección Fronteriza, destacó que miles de ciudadanos iraníes han ingresado ilegalmente, lo que incrementa el problema para las autoridades.
Es importante destacar que, la posibilidad de represalias incluye ataques cibernéticos, atentados violentos y amenazas contra infraestructuras y comunidades judías en Estados Unidos. El boletín de seguridad del DHS advierte que un llamado religioso desde Irán podría movilizar a extremistas independientes en tierras estadounidenses. Además, las tropas y bases militares en Medio Oriente también son consideradas vulnerables a represalias directas por parte de Irán o sus aliados.
El gobierno iraní ha condenado públicamente los bombardeos y ha prometido una respuesta. El secretario de Defensa, Pete Hegseth, y el jefe del Estado Mayor Conjunto, Dan Caine, advirtieron que los intereses estadounidenses, tanto dentro como fuera del país, podrían ser blanco de ataques. En respuesta, Estados Unidos emitió una alerta global para sus ciudadanos en el extranjero, instándolos a extremar precauciones.
Fuente: Tribuna
