Texas, Estados Unidos.- Una lluvia intensa que cayó por al menos tres horas en Hill Country, Texas, dejó como saldo al menos 13 personas muertas y más de 20 niñas desaparecidas que asistían a un campamento de verano, mientras los equipos de búsqueda realizan rescates en botes y helicópteros en las aguas luego de la inundación que alcanzó niveles estimados de 15 a 25 centímetros con fuertes corrientes.
El viernes por la madrugda, se reportaron continuos cortes de electricidad y árboles caídos en todo el sur de Nueva Inglaterra, donde algunas comunidades recibieron fuertes granizos. Se reportaron vehículos derrapando fuera de la carretera en el noreste de Connecticut.
El vicegobernador Dan Patrick informó que se han encontrado entre 6 y 10 cadáveres hasta el momento en la frenética búsqueda de víctimas, mientras tanto, el sheriff del condado de Kerr, Larry Leitha, informó que hubo 13 muertos por las inundaciones, en donde al menos 25 centímetros de lluvia cayeron durante la noche en el centro, causando inundaciones en el río Guadalupe, por lo que aumento la demanda de información sobre personas desaparecidas.
Los equipos realizaron decenas de rescates y los servicios de emergencia continuaron la búsqueda de personas desaparecidas, entre ellas a más de 20 niñas desaparecidas de campamentos de verano, por lo que pidió a la comunidad orar para encontrarlas.
De acuerdo con información de El Universal, en la cuenta de Facebook de la oficina del sheriff, varias personas han publicado fotos de sus seres queridos esperando información actualizada sobre su paradero, el juez Rob Kelly, principal funcionario electo del condado, confirmó las muertes por las inundaciones y decenas de rescates acuáticos hasta el momento.
Añadió que se le recomendó no citar cifras específicas y que las autoridades siguen trabajando para identificar a las personas fallecidas ya que algunas no tenían identificación alguna, una alerta de inundación emitida el jueves por la tarde estimó cantidades aisladas de hasta 17 centímetros (7 pulgadas) de agua. Esto se convirtió en una alerta de inundación para al menos 30 mil personas durante la noche.
El juez Rob Kelly indicó que estas lluvias fueron repentinas e inesperadas por lo que no tenían previstas estas inundaciones, a pesar de ser el valle fluvial más peligroso de Estados Unidos y tener inundaciones de manera constante pero no con esa intensidad
El gobernador de Texas, Greg Abbott, dijo que el estado estaba proporcionando recursos a las comunidades de Hill Country que enfrentan las inundaciones, incluidas Kerrville, Ingram y Hunt.
Algunas zonas de la región son propensas a inundaciones repentinas como la montañosa de Texas, una pintoresca y rocosa puerta de entrada a florecientes viñedos y alquileres vacacionales, que comienza al oeste de la capital del estado y es una popular escapada de verano al aire libre.
El Departamento de Bomberos de Ingram publicó una foto de un comunicado de Camp Mystic, en el que se informa que el campamento de verano cristiano privado para niñas sufrió inundaciones catastróficas. Se contactó directamente a los padres con una hija desaparecida, según el campamento.
Decenas de personas publicaron en Facebook pidiendo información sobre sus hijos, sobrinos y sobrinas que asistían a uno de los muchos campamentos de la zona, o sobre miembros de su familia que fueron a acampar durante el fin de semana festivo. Otros dos campamentos en el río, Camp Waldemar y Camp La Junta, dijeron en publicaciones de Instagram que todos allí estaban a salvo.
El medidor del río Guadalupe en la comunidad no incorporada de Hunt, donde el río se bifurca, registró un aumento de 6,7 metros (22 pies) en tan solo dos horas, según Bob Fogarty, meteorólogo de la oficina de Austin/San Antonio del Servicio Meteorológico Nacional. Fogarty indicó que el medidor falló tras registrar un nivel de 9 metros (29 pies y medio).
Las zonas al este del río Guadalupe se preparaban para sus propias inundaciones a medida que las rápidas aguas descendían río abajo desde Hunt y Kerrville. En el condado de Kendall, donde se encuentra la comunidad no incorporada de Comfort, la oficina del sheriff dio la alarma.
En Nueva Jersey debido a las fuertes tormentas eléctricas dos hombres de 79 y 25 años murieron después que un árbol cayera sobre un vehículo en que viajaban durante el pico de a tormenta, “Hoy nos sentimos apesadumbrados”, declaró el alcalde Adrian O. Mapp. “Esta tragedia es un triste recordatorio del poder de la naturaleza y la fragilidad de la vida”.
La ciudad canceló su desfile, concierto y espectáculo de fuegos artificiales previstos para el 4 de Julio. Mapp afirmó que las devastadoras tormentas habían dejado profundas cicatrices y daños generalizados en la comunidad de más de 54 mil habitantes, y que era momento de reagruparse y concentrar toda nuestra energía en la recuperación.
Fuente: Tribuna
