Ciudad de México.- La inflación en México sigue aumentando y en la primera quincena de mayo se ubicó en 4.78 por ciento, según los datos más recientes del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi). Esta cifra representa la tercera quincena consecutiva de alza.
A pesar de que el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) mostró una disminución de 0.21 por ciento a tasa quincenal, la inflación interanual subió de 4.67 por ciento en la segunda mitad de abril a 4.78 por ciento en la primera mitad de mayo. Este incremento está en línea con las expectativas del mercado, pero sigue estando por encima del objetivo del Banxico, que es de 3 por ciento ± 1 punto porcentual.
El reporte del Inegi identifica varios productos y servicios que contribuyeron significativamente al aumento de precios durante este período. Entre ellos se destacan el jitomate, el chile serrano, la vivienda propia, el transporte aéreo, el huevo, la gasolina de bajo octanaje (mejor conocida como Magna), el chile poblano, el aguacate, la naranja y la leche.
Sin embargo, algunos productos se vieron reducidos en sus precios, lo cual ayudó a mitigar parcialmente la inflación. Entre estos productos se encuentran la electricidad, la cebolla, el gas doméstico LP, el tomate verde, el melón, el pepino, la lechuga y col, la papa y otros tubérculos, el limón y las lavadoras de ropa. La disminución en el precio de la electricidad se debe al programa de tarifas eléctricas de temporada cálida, que comenzó a aplicarse en varias ciudades del país, incluyendo Mexicali, Ciudad Juárez, Culiacán, Chihuahua, Hermosillo, Matamoros, Colima, La Paz, Huatabampo, Ciudad Jiménez y Esperanza.
Al interior del INPC, la inflación subyacente, que excluye los precios de bienes y servicios más volátiles como los agropecuarios y los energéticos, mostró un aumento de 0.15 por ciento a tasa quincenal y 4.31 por ciento a tasa anual. Dentro del índice subyacente, los precios de las mercancías crecieron 0.11 por ciento quincenalmente y 3.55 por ciento anualmente, mientras que los precios de los servicios aumentaron 0.20 por ciento quincenalmente y 5.23 por ciento anualmente.
Por otro lado, la inflación no subyacente registró una caída de 1.31 por ciento a tasa quincenal, pero un aumento de 6.27 por ciento a tasa anual. En este rubro, los precios de los productos agropecuarios subieron 0.43 por ciento quincenalmente y 8.75 por ciento anualmente, mientras que los precios de los energéticos y las tarifas autorizadas por el gobierno disminuyeron 2.86 por ciento quincenalmente pero aumentaron 4.08 por ciento anualmente.
El aumento continuo de la inflación se ha convertido en un obstáculo para Banco de México que considera actualmente recortar su tasa de interés clave en su próxima decisión de política monetaria. En su reunión más reciente a principios de mayo, Banxico decidió mantener la tasa referencial en 11 por ciento, después de haberla reducido en marzo por primera vez desde que comenzó su ciclo restrictivo en 2021.
Fuente: Tribuna