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Ciudad de México.- La cultura popular ha establecido que los perros y los gatos no pueden llevarse bien, por lo que pensar en tener a estas dos especies de animales en el interior de tu casa provoca que uno se lo piense más de dos veces.
La realidad es que es posible lograr que estos dos tipos de mascotas se lleven bien, de hecho no resulta ser tan complicado como lo que muchos piensan. Descubre algunos consejos que te ayudarán en esta tarea.
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- Presentación. Procura que cuando se conozcan, tu perro traiga puesta la correa, así evitarás que se lance contra el gato. Evita cargar a alguno de los dos o pensarán que se trata de un juguete que pueden atacar, trata de mantenerte tranquilo mientras se olfatean.
- Espacios seguros. Antes de presentarlos, asegúrate de que tu gato posea un sitio alto donde pueda huir en caso de que el perro pierda el control, de esta manera el felino tendrá más vías de escape y estará más calmado.
- Edad. Lo más recomendable es que tanto gato como perro convivan desde que son cachorros, así lo verán como algo natural.
- Evita el acercamiento. Muchos dueños cometen el error de acercar al gato al rostro del perro para que lo huela, no lo hagas, podrías exponer a tu can a ser arañado.
Generalmente, los primeros acercamientos tienden a ser tensos, pero procura manejar todo de forma natural. Si notas que alguno de los dos quiere atacar al otro, haz algún ruido fuerte para distraerlos, así asociarán que no está bien atacarse.
Fuentes: Kiwoko, Instagram