Ciudad de México.- Imagínate que quieres ir de vacaciones y decides tomar un vuelo para cambiar de aires, el único problema es que, mientras te encuentras en el cielo, el avión comienza a sufrir algunas turbulencias, esto podría volverse algo aterrador, ¿no es así? Pues esta misma situación fue la que vivieron un grupo de pasajeros, solo que sus circunstancias dieron un grato giro de acontecimientos. Descubre cuál es la razón.
Como se mencionó anteriormente, lo que era considerado como un tranquilo vuelo, se vio interrumpido de golpe por una serie de turbulencias, aunque este vuelo no se trataba de algo común, ya que, en aquel avión se encontraban viajando los afamados cantantes, Carlos Baute y Marta Sánchez, quienes son principalmente conocidos por sus temas: Te sigo pensando y Colgando en tus manos.
Resulta ser que una de las aeromozas se percató de la presencia de los famosos, por lo que, amablemente, les pidió que interpretaran un tema, esto con la finalidad de calmar el estrés de la mayoría de pasajeros, por lo que los cantantes accedieron y pasaron al frente del avión y, aunque en un principio tanto Marta como Carlos lucían nerviosos, esta sensación terminó por disiparse conforme continuaban cantando.
Incluso, las azafatas comenzaron a hacer los coros, mientras que los pasajeros olvidaron por completo las turbulencias y sacaron sus teléfonos para poder grabar el improvisado show que los artistas estaban dando. Parece ser que esta situación resulto extraña y sorpresiva para los propios intérpretes, ya que, la misma Marta compartió el momento a través de su cuenta oficial de Facebook, desde donde contó su perspectiva de las cosas.
Marta menciona que, luego de que la azafata se acercara amablemente a Carlos y a ella, no se pudieron negar a dar el show: "Hoy pasó algo muy loco. Íbamos en un avión y empezó una turbulencia fuerte", comenzó a narrar Sánchez, "Al parar el movimiento, la azafata (de buenas maneras) nos dice: '¿Por qué no cantan una canción y así la gente se lo pasa mejor?'. Carlos y yo nos miramos y dijimos: ¿Por qué no?". Y en definitiva, parece ser que todo el mundo la pasó mejor
Fuentes: Tribuna