Ciudad de México.- ¿Quieres lucir tu labial favorito pero tienes miedo de un efecto transferencia que lo haga desaparecer en unas horas? Un maquillador profesional comparte una técnica simple para solucionar esto. Unos labios pintados llaman la atención de cualquiera, pero ¿qué pasa cuando vamos dejando rastros de producto por todos lados? Por ejemplo, en el vaso del que bebemos agua o en las mejillas de quienes besamos. Esto puede ser un verdadero fastidio. Olvidémonos de este problema con este consejo fácil de poner en práctica.
Para muchas, el lápiz labial es EL producto de maquillaje que cambia un look por completo. Un labio rojo dará inmediatamente un efecto glamoroso y elegante, el color nude dará una apariencia de mujer fresca y limpia, al mismo tiempo que dará ese pequeño brillo saludable, y los colores más oscuros agregarán intensidad.
Existen diferentes texturas y técnicas de aplicación. Para un efecto duradero y sin transferencia, generalmente recomendamos recurrir a un producto mate. Pero si no tienes uno, es posible transformar tu rojo habitual y hacerlo casi sin transferencias con un simple truco. En TikTok, a una maquilladora le gusta compartir sus consejos, trucos y looks de maquillaje para el deleite de sus más de 514 mil suscriptores. En particular, compartió EL producto ideal que reemplaza el polvo para una tez suave o un consejo fácil para evitar que el lápiz labial forme líneas finas .
- La técnica para obtener un labial transfer-free en segundos
En uno de sus últimos vídeos, comparte su pequeño consejo para hacer que el lápiz labial sea (casi) libre de transferencias. Para ello, empieza maquillando sus labios con un clásico rojo no mate. Luego toma un pañuelo fino (pañuelo, papel higiénico o toalla de papel partida) para obtener una fina capa que se coloca en la boca.
Luego toma un poco de polvos sueltos y los aplica con una esponja de maquillaje, como una beauty blender, sobre el papel, dando golpecitos para que el producto penetre. A continuación se matifica la barra de labios, sin exceso de material, directamente sobre la boca. Luego demuestra, con pruebas que lo respaldan, golpeándose la boca con su pañuelo, que permanece limpio, ¡su lápiz labial se ha vuelto libre de transferencias!
Fuente: Tribuna