Ciudad de México.- Diariamente, se abusa de los pies; son ellos los encargados de llevarnos a todos lados y muchas veces no les damos el cuidado que requieren. Pero nunca es demasiado tarde para mimarlos. Reconocido como producto de limpieza, el bicarbonato de sodio se utiliza en cosmética, en particular para el cuidado de los pies. Es uno de los grandes productos para tener en el neceser, al igual que una crema u otra manteca de karité.
Este polvo blanco e inodoro tiene propiedades suavizantes y calmantes. Tiene el poder de aliviar la picazón e hidratar la piel. También ayuda a combatir los malos olores, las infecciones por hongos, los eccemas e incluso los callos en los pies. Son muchísimos beneficios, ¿no crees? Para utilizarlo, nada más sencillo, basta con hacer baños con este ingrediente en casa. Descubre algunas ideas de recetas de baños de pies con bicarbonato de sodio, ultrasencillas de hacer.
- Mal olor
El mal olor de los pies se debe tanto a la transpiración como a menudo también a hongos microscópicos que a veces se desarrollan en forma de micosis o levaduras de la piel o de las uñas. Para eliminar los olores, diluye completamente dos cucharadas (equivalentes a 30 gramos) por litro de agua tibia y proceder a baños de 20 minutos. Enjuagar o no dependiendo de la tolerancia de la piel al bicarbonato de sodio. Este ritual se puede realizar a su conveniencia y según sea necesario. Para un olor muy fuerte y muy presente, puedes hacer un baño de pies diariamente y luego espaciarlo en días alternos, luego una o dos veces por semana y luego una vez por semana.
- Callosidades
Los callos son durezas que se forman en los pies por fricción o presión repetida. Aquí tienes una receta sencilla de un tratamiento a base de bicarbonato de sodio y aceites esenciales para ayudar a tratar los callos.
Ingredientes:
-Una cucharada de bicarbonato de sodio.
-Cinco gotas de aceite esencial de lavanda.
-Cinco gotas de aceite esencial de árbol de té.
Mezcla el bicarbonato de sodio y los aceites esenciales en un tazón pequeño con un poco de agua para suavizar la mezcla sin que quede líquida. Aplica la mezcla en las zonas afectadas de tus pies y masajea suavemente durante cinco minutos. Deja reposar la mezcla durante 10 a 15 minutos. Enjuágate en la ducha y sécate los pies con una toalla limpia. Repite este tratamiento una o dos veces por semana para ayudar a suavizar los callos y reducir la inflamación y el dolor asociados.
Los aceites esenciales tienen propiedades antiinflamatorias y antisépticas que ayudan a aliviar el dolor y prevenir infecciones. El bicarbonato de sodio actúa como un exfoliante suave para eliminar las células muertas de la piel y promover la curación.
Fuente: Tribun